La dirección colegiada de Argelia reafirma la línea política de Bumedian

El presidente Huari Bumedian será inhumado hoy en el Panteón de los Mártires del cementerio El Alia, de la capital argelina, en presencia de diversos jefes de Estado y otros representantes gubernamentales, con predominio de los del mundo árabe y países socialistas. El ministro de Asuntos Exteriores, Marcelino Oreja, encabeza la delegación española, integrada por altos funcionarios de su departamento. La forma en que los medios oficiales argelinos rinden cuenta de los testimonios de condolencia recibidos revela, según los observadores, un «deseo de continuidad en las líneas generales de la política exterior». Durante toda la jornada de ayer se produjeron nuevas escenas de histeria y dramatismo ante el Palacio del Pueblo, donde reposan los restos del dirigente argelino.

Una proclamación del Consejo de la Revolución, difundida en primera página de las ediciones especiales de la prensa argelina, reafirma que Argelia «seguirá su marcha revolucionaria bajo la autoridad del Frente de Liberación Nacional (FLN) en la vía trazada por Bumedian, a través de una ideología inspirada en la civilización, la historia secular y los sacrificios del pueblo argelino». Esta ha sido la primera indicación oficial de que la dirección colegiada que controla las riendas del poder, bajo la presidencia provisional de Rabah Bitat, entiende conferir al FLN la condición de marco jurídico donde ha de definirse el proceso de sucesión del fallecido jefe del Estado.

Consenso táctico

Este respeto a los principios contenidos en la Constitución argelina no sorprende a los analistas, sino que, por el contrario, sería un nuevo signo de que el consenso táctico establecido entre el Consejo de la Revolución, el Gobierno y los más importantes jefes militares constituye un compás de espera premeditado.En el mismo orden de ideas hay que situar la presentación hecha aquí de los mensajes de condolencia, con estricta fidelidad a los planteamientos básicos de la diplomacia argelina, dirigida por Abdel-aziz Buteflika, uno de los posibles candidatos a la presidencia. De esta manera, los testimonios enviados por las autoridades egipcias han sido reflejados escuetamente y se han ignorado por completo los de Ali Yata y Abderrahim Buabid, dirigentes de los partidos comunista y socialista marroquíes.

La representación egipcia a los funerales está formada por Khaled Mohieddine, presidente del Partido de la Unión Progresista, que forma una de las fuerzas de oposición a Sadat. También ha sido autorizada la presencia de miembros de la oposición clandestina marroquí, en particular el movimiento Al Alam.

Pero la atención de los observadores sigue centrada en la llegada del ministro de Asuntos Exteriores mauritano, Uld Mohamed Laghdaf, quien dirige una importante delegación de su país a las exequias. La agencia oficial de prensa argelina ha puesto de relieve esta decisión de las autoridades de Nuackchott, que contribuye a valorizar la «dinámica de paz» en la región mogrebí, a la que el propio Bumedian daba su apoyo personal.

Posible conversación sobre el Sahara

No se descarta que al margen de la ceremonia de los funerales el ministro mauritano sostenga una entrevista discreta con su colega argelino, en presencia de algún dirigente del Frente Polisario, como tampoco sería de extrañar que a tales conciliábulos pudiera asociarse el titular de la cartera de Asuntos Exteriores de España.La dirección política y militar del Frente Saharaui se encuentra en Argel al completo y ha sido una de las primeras en ser autorizada a rendir homenaje póstumo a Bumedian. Una declaración formulada por Mohamed Abdelaziz, secretario general del Polisario, no contiene, sin embargo, más que los usuales términos de condolencia y homenaje y no hace referencia explícita al conflicto del Sahara.

Un féretro simple

Hasta ahora han confirmado su asistencia a los funerales los jefes de Estado de Siria, Níger, Malí y Chipre, así como la esposa de Burghiba y Yasser Arafat. Las capitales occidentales estarán representadas por sus ministros de Asuntos Exteriores. En el momento de transmitir esta crónica se desconocía todavía quién representará a los Gobiernos norteamericano y soviético.Bumedian, que siempre rechazó utilizar como residencia el ampuloso palacio de verano de la época colonial francesa y prefirió vivir en residencias más modestas, reposa ahora en un simple féretro de madera pulida, sobre un catafalco instalado en el vestíbulo del Palacio del Pueblo.