Los socialistas marroquíes urgen a un diálogo con España sobre Ceuta y Melilla

Los socialistas marroquíes podrían considerar la posibilidad de interrumpir la colaboración con la monarquía, si el rey pospone la inplantación de una democracia real en Marruecos y no adopta una política más firme con respecto al Sahara y los «presidios españoles» (Ceuta, Melilla y peñones de Alhucemas).

La lamentable situación de la economía que en los últimos diez años sólo llevó al ensanchamiento de la distancia entre ricos y pobres, debe encontrar remedio urgente, según exigió ayer Abderrahim Buabid, primer secretario de la Unión Socialista de Fuerzas Populares (USFP) al inaugurar el tercer congreso de su partido.El trucaje y la manipulación por el poder de las elecciones legislativas de 1977 se expresa en el informe de Buabid, refleja la relatividad y los límites de la apertura democrática consentida por el régimen.

El líder socialista marroquí invitó al poder a «una solución urgente de los problemas pendientes relativos a la integridad territorial y soberanía de Marruecos, concretamente el Sahara Occidental, Ceuta y Melilla y los presidios», sin olvidar según añadió, los territorios de Bechar Kenadsa, Tuat y Tinduf, adscritos por Francia a Argelia y sobre los cuales los partidos marroquíes mantienen un importante contencioso con Argel.

Después de acusar al régimen de molicie en este terreno el líder socialista recordó que su compatriota propuso a la monarquía la elaboración de una estrategia coherente en lo político, diplomático y militar, que incluya la creación de un ejército de liberación bajo los auspicios del partido.

En lo que concierne al Sahara y los conflictos fronterizos con Argelia, la USFP entiende que sólo podrían encontrar solución real en un marco maghrebi unitario que permitiese la explotación común de los recursos de la zona en beneficio prioritario de los pueblos que viven en ella.

Con respecto a España y aunque la intervención del jefe socialista no apuntaba ningún paso concreto para aplicar el programa de su partido, al margen de los discursos oficiales, se sugiere una comprensión de la situación interna de España y una disposición a dialogar en calma, pero eso sí, sin dilaciones.

Los socialistas marroquíes parecen ser conscientes, al señalar al rey los límites de su paciencia, del momento psicológico oportuno para esta advertencia y no dejan de indicar, en privado, la preocupación con que la monarquía marroquí sigue la evolución de la situación en Irán.

El tercer congreso, de la USFP, iniciado el viernes, será clausurado hoy por la tarde.La representación española es la más numerosa y variada. Asiste la UCD, el PSOE, la ORT y el Partido Socialista de Andalucía. Todos ellos intervinieron en la sesión inaugural señalando los lazos particulares de España con el mundo árabe y en su respaldo al socialismo marroquí.