Repulsa española ante la ONU por el ataque al pesquero "Cruz del Mar"

El Gobierno español expresó anoche ante las Naciones Unidas su más «enérgica repulsa» por el atentado cometido el pasado martes en el banco sahariano contra un barco pesquero español que costó la vida a ocho personas, y dijo que estos hechos aumentaban su preocupación sobre el desarrollo de la situación en la región noroccidental de Africa.En un breve discurso ante la cuarta comisión de la ONU, el embajador permanente de España ante la organización internacional, Jaime de Piniés, resaltó la necesidad de proceder al esclarecimiento de los hechos para determinar la identidad y responsabilidad de los agresores e impedir la repetición de acciones similares.

«Crímenes de esta naturaleza no facilitan la búsqueda de una solución pacifica y acrecientan la preocupación de mi Gobierno,sobre la evolución de la situación en la región noroccidental de Africa», añadió el representante español.

La cuarta comisión de la ONU, encargada de los procesos de descolonización, celebra estos días un debate sobre el Sahara occidental. Dos proyectos de resolución han sido presentados a la cuarta comisión, uno con el apoyo de Argelia y otro con el de Marruecos y Mauritania.

El primero pide que el problema del Sahara sea debatido en el seno de las Naciones Unidas y que se, reconozca al Frente Polisario como legítimo representante del pueblo saharaui, mientras que el segundo pretende que la cuestión del Sahara se trate únicamente en la Organización para la Unidad Africana (OUA).

El embajador Piniés dijo anoche que España favorece la liúsqueda de fórmulas para eliminar la tensión en la zona, en el marco de una solución «justa y duradera» del problema del Sahara. Esta solución debe contar con el acuerdo de las partes implicadas y tener en cuenta asimismo la voluntad del pueblo saharaui.

Piniés señaló la esperanza del Gobierno español en los acontecimientos recientes que pueden contribuir al logro de esa paz «justa y duradera que, desearnos». Entre ellos citó la decisión de la OUA de crear un comité ad hoc compuesto por cinco jefes de Estado africanos para estudiar el conflicto del Sahara.

Para el representante español ante la ONU, esta organización y la OUA pueden actuar simultáneamente en el problema del Sahara, y sus esfuerzos conjuntos serán de «inapreciable valor» para estabilizar la zona noroccidental de Africa. España, añadió Jaime de Piniés, «no puede permanecer indiferente ante una situación de tensión en esa zona».