El Rey responde a Marruecos en la cena ofrecida al presidente de Sudán
El rey don Juan Carlos rectificó ayer su discurso en la cena ofrecida en honor del presidente de Sudán, Gaafar el Numeiri, quien llegó ayer a Madrid en visita oficial de tres días de duración, acompañado de nueve ministros de su Gobierno, para responder a las reivindicaciones de Ceuta y Melilla formuladas ayer en Washington por el ministro marroquí de Asuntos Exteriores, Mohamed Bucetta.
En un párrafo de su discurso, el Monarca español dijo: «Vuestra excelencia sabe el afecto fraternal que los españoles sentimos por la nación árabe y por todos y cada uno de los pueblos que la componen. Sus justas causas las hemos hecho nuestras, con el sacrificio incluso de nuestros propios intereses materiales, con desprendimiento sincero, por creer obedecer así a los dictados de la justicia y a la propia tradición. El pueblo español está seguro de que esta clara postura será siempre comprendida, apreciada y correspondida por los pueblos árabes. Pero, ellos saben que en lo que jamás transigiremos es, en nada que pueda atentar a nuestra integridad territorial. »La crisis del Sahara, los debates de la OUA sobre Canarias y las relaciones hispano-árabes e hispano-africanas serán los temas esenciales de las conversaciones que mantendrá en Madrid el presidente de la República Democrática de Sudán, quien llegó en avión especial al aeropuerto de Barajas a las cuatro y media de la tarde de ayer. El rey don Juan Carlos recibió al pie de la escalerilla del avión al jefe del Estado de Sudán.
Después de escuchar los respectivos himnos nacionales y de pasar revista a las tropas, don Juan Carlos y El Numeiri saludaron a las autoridades que fueron a recibirles: el presidente Suárez, el presidente de las Cortes, señor Hernández Gil; el vicepresidente primero del Gobierno, general Gutiérrez Mellado; varios ministros y embajadores.
Desde el aeropuerto de Barajas el rey don Juan Carlos acompañó al presidente sudanés al hotel Ritz, que será su residencia oficial en España. Posteriormente, el Rey de España ofreció una cena en el palacio de Oriente en honor de su invitado y a la que asistieron numerosos representantes de la Administración, de los partidos políticos -entre los que se encontraban los señores Carrillo, González y Fraga- y del cuerpo diplomático. Al término de la cena, el rey don Juan Carlos pronunció un discurso en el que dijo: «Vuestra excelencia ha definido a Sudán como el microcosmos de Africa. Por ello, con gran acierto, la Organización de la Unidad Africana aceptó reunirse en su XV conferencia «cumbre» en Jartum, la ciudad de los dos Nilos. La OUA ha sido el foro de un debate franco y sincero, y en un año de evidentes dificultades para el continente africano, la prudencia y habilidad de vuestra dirección y de vuestra objetiva presidencia han supuesto un especial éxito para el país anfitrión y, al mismo tiempo, ha reforzado la credibilidad de la Organización. El conjunto de las resoluciones aprobadas hablan del alto nivel de madurez política alcanzado.»
«Confiamos en que bajo vuestra presidencia el continente africano continúe avanzando en el camino de la solución de sus problemas. Entre éstos, merece especial preocupación a España, dada nuestra vecindad y los lazos que nos unen a las partes implicadas, la tensión en el área magrebí en torno al Sahara occidental. Esperamos que, con vuestra participación, las disposiciones adoptadas por la OUA permitan sentar las bases de una solución regional, aceptable para todos, y acorde con los principios establecidos por la Organización.»
«Deseo que, en su calidad de presidente de la OUA, recoja vuestra excelencia el mensaje de amistad y de cooperación del pueblo español. España no tiene ningún contencioso con los países africanos que pueda impedir la posibilidad de excelentes relaciones. Deseamos tenerlas amistosas con todos los pueblos de ese continente y deseamos además profundizarlas y darles contenido real y concreto en la medida de nuestros recursos.
Agradecimiento de El Numeiri
Tras las palabras pronunciadas por el rey don Juan Carlos, el presidente de la República Democrática de Sudán, general Numeiri, contestó haciendo, en primer lugar, un elogio a la hospitalidad y nobleza del Rey y del pueblo español. El presidente de Sudán subrayó seguidamente, con frases encomiásticas, la ayuda prestada por España a su país en diversas ocasiones, en especial con motivo de las recientes inundaciones.Dijo, asimismo, que el camino y desarrollo de su país quedó cimentado en la estabilidad política lograda después de los acuerdos de Addis Abeba, que sellaron la pacificación entre el norte y el sur de Sudán.
El general Numeiri invitó a las empresas españolas a «participar en los grandes proyectos de desarrollo de Sudán», especialmente en lo que respecta a la agricultura y los servicios.
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