Madrid desaprovecha diariamente seiscientas toneladas de combustible

El problema de los residuos sólidos urbanos, conocidos como basuras, la recogida y, fundamentalmente, su eliminación o aprovechamiento por las autoridades locales cara a un futuro inmediato, está empezando a preocupar. Cuanto mayor es el nivel de vida en las ciudades más se complica el problema produciendo, en consecuencia, un aumento en la cantidad de desechos, así como en el costo de los procedimientos de eliminación y recuperación.Concretamente en Madrid y su provincia, el problema de cómo terminar las 4.000 toneladas de basura producidas diariamente está alcanzando serias proporciones en los últimos años debido, sobre todo, a la disminución de zonas disponibles como vertederos y a su ubicación cada vez más lejana del centro de las ciudades.

Entre los motivos principales que de unos años a esta parte han provocado el actual nivel de gravedad son, entre otros, el progreso tecnológico continuo, así como la mejora en los métodos de fabricación y embalaje de los productos de consumo y que han dado lugar a un aumento creciente de los materiales de desecho. El crecimiento económico y demográfico, así como la mejora del nivel de vida de la población, ha exigido una producción industrial en aumento que, junto con las operaciones agrícolas y comercial¿ han dado lugar a un aumento de desechos, basuras y desperdicios.

Por otra parte, los métodos ineficaces o inapropiados de tratamiento de residuos sólidos producen un deterioro en el paisaje, graves riesgos para la salud pública -mediante la contaminación del aire y de los recursos hidráulicos y un aumento en la transmisión de enfermedades por roedores e insectos.

Según datos recogidos en el Informe General sobre Medio Ambiente en España, publicado por la Subsecretaría de Planificación de Presidencia dé Gobierno en el pasado año, así como por CIFCA, en 1974 fueron vertidos de forma incontrolada en el país más de 7.000.000 de toneladas de residuos sólidos urbanos equivalentes. en volumen. a 37.500.000 dm3 de, basura. Su principal característica es su continua permanencia en el lugar donde son depositados. sin que sea posible hacerlos desaparecer por la sola acción de los agentes meteorológicos.

Partiendo de estas cifras se puede prever que para los últimos años del actual siglo y con una generación de recursos de 25.660.130 tm/año, la problemática ambiental causada por unos vertidos anárquicos e incontrolados, tal y como se vienen realizando en la actualidad en la mayoría de las ciudades, aumentará los ya graves problemas de contaminación y de carácter sanitario.

Vertederos ilegales

De los, dos sistemas utilizados tradicionalmente en España para la eliminación de basura -vertido controlado o incontrolado y la incineración-, el vertido controlado es. casi sin excepciones, el utilizado en todas las ciudades españolas. No obstante, la mayoría de las veces se realiza de forma incontrolada, creando graves problemas de contaminación, enfermedades y malos olores. Por otra parte, son raros los casos en que un vertido controlado reúne las garantías necesarias para que el control del mismo no tenga consecuencias nocivas.

Respecto a la incineración, el problema no varía. Pocos son los tratamientos que se realizan con unas mínimas garantías para prevenir la contaminación. siendo incapaces. en la mayoría de los casos, de un funcionamiento con régimen adecuado. Aún más, el bajo poder calorífico de los residuos sólidos españoles -entre 500 y 1.200 kilocalorías- crea graves problemas en la utilización de este tratamiento, ya que al no ser autocombustibles, es necesario la administración -de combustibles convencionales, con lo que su coste puede llegar a alcanzarlas las 1.500 pesetas por tonelada.

Centrándonos en la provincia de Madrid, los 172 vertederos calificados como controlados carecen de un buen funcionamiento. Y esto ha sido reconocido por las distintas autoridades locales en la última de las visitas realizada por la Comisión Provincial de Med lo Ambiente y en la que se pudo observar cómo la totalidad de los basureros estab n prendidos, así como sus inmediaciones.

Para agravar el problema, según declaraciones de Carlos Carrasco, «todos los vertederos instalados en la provincia infringen la ley Ambiental ya que al no haber cumplido los requisitos contemplados por la legislación vigente, son ilegales en cuanto a su u.bicación».

La ley sobre Desechos y Residuos Sólidos Urbanos, de 1975, aunque no obliga sí contempla la necesidad de que todo depósito o vertedero de residuos se encuentre ajustado a un proyecto técnico aprobado por la autoridad administrativa. En ninguno de los casos ha sido cumplida.

«El actual vertedero de Madrid se está empezando a adecuar para convertirlo en un vertedero controlado y esperamos que pueda empezar a funcionar, al menos parcialmente, el próximo mes de noviembre nos dice Florentino Pérez, delegado de Saneamiento y Medio Ambiente del Ayuntamiento. «También estamos montando una trituradora con capacidad para 2.400, toneladas diarias y cuyo funcionamiento está previsto que dure diez años.»

Pocas previsiones

La transformación en un futuro vertedero controlado y las gestiones que Carlos Carrasco -delegado de la Comisión Provincial del Medio Ambiente- está llevandoa cabo para instalar una planta desecadora en los pueblos del suroeste de Madrid, que transforme y guarde la riqueza energética de las basuras, son las únicas previsiones que existen a nivel oficial.

De las 2.400 toneladas de basuras que diariamente se desechan ert Madrid -a las que habría que sumar los vertidos.por los ciudadanos en solares, descampados, etcéte ra-, 2.100 van a parar directamen-, te a Valdemingómez, sin que previamente sufran tratamiento alguno, ni un control posterior en orden a evitar las posibles consecuencias sanitarias Y de contaminación. Este abandono así como la poca previsión acrecientan el peligro de que dentro de unos años el terreno quede convertido en una gran montaña de escombros.

Las trescientas toneladas restantes son llevadas a San Cristóbal de los Angeles, donde una planta transformadora los convierte en abono. Abono, por otra parte, poco rentable económicamente debido a su difícil comercialización y venta.

La eliminación de la basura supone un costo para el Ayuntamiento de 350 pesetas/ tonelada. En 1976 la producción de basura en la provincia de Madrid se acercó a las 3.800 toneladas/día.

Según el informe ya citado y a pesar de que el estudio estadístico de los residuos resulta difícil por la ausencia de datos fidedignos, se puede hablar de una producción de cerca de veinte millones de toneladas de basura para 1997.

«El Ayuntamiento de Madrid cumple su función eliminando la basura en condiciones higiénicas y sólo esto ya nos cuesta 350 pesetas por tonelada. Si a esto unimos el bajo presupuesto económico de que disponemos -señala Florentino Pérez- está claro que el Ayuntamiento no está en condiciones de hacerse cargo de la transformación de residuos, aunque sí está dispuesto a cooperar, siempre que su costo no sea superior al actual. »

Las basuras constituyen una importante fuente de materias primas que, de forma inversa a los recursos naturales -susceptibles de un progresivo agotamiento-, no solo se renueva anualmente, sino que aumenta de año en año.

Asimismo, una buena política de aprovisionamiento dirigida a conseguir un costo menor en la fabricación de los productos, así como una mayor duración del período de utilización por parte del consumidor y una reutilización máxima de los residuos, no solo supondría un ahorro directo de inaterias primas, sino que también se traduciría en una notable economía de la energía necesaria en el país. Sobre todo si se tiene en cuenta que la recuperación y reutilización de los desechos y residuos, bien procedentes de la actividad industrial o los abandonados por el hombre, es una de las tres fuentes de aprovisionamiento de que dispone la industria española.

Un ejemplo sería la traducción en cifras de la capacidad de reutilízación no aprovechada en los desechos nacionales. Así, en 1975, fueron importadas más de dos millones de toneladas de desechos o chatarras de hierro, cobre, aluminio,eplomo y zinc, por un valor superior a los 20.000 millones de pesetas. Por la ausencia de un tratamiento adecuado en la recuperación de basuras, sólo en Madrid se pierden diariamente seiscientas toneladas de combustible.