Pekín responsabiliza a Moscú de la crisis con Hanoi

China y Vietnam iniciaron ayer en Hanoi una nueva serie de conversaciones para tratar de solucionar el problema de los residentes chinos en el segundo país. Esta nueva tanda de negociaciones ha coincidido con nuevas acusaciones mutuas. El jefe de la delegación china, el viceministro Chung Hsi-tung, en su intervención, acusa a Hanoi de haber desencadenado una campaña antichina y ha atribuido la crisis entre los dos países a la influencia de la URSS sobre la política exterior vietnamita.

El delegado chino informó que las autoridades vietnamitas han lanzado una campaña de desprestigio contra las minorías chinas residentes en Vietnam, de la que Moscú, más que Hanoi, es el principal beneficiario. Según Chung Hsi-tung, Moscú y Hanoi trabajan juntos para reducir la influencia china en Asia, y que esta política , exterior vietnamita era la «razón esencial» -y la «única explicación racional» del problema de los residentes chinos.

Por su parte, Hanoi mantiene que Pekín ha incitado a los residentes chinos contra las autoridades vietnamitas tras las medidas económicas adoptadas meses atrás que afectaban al comercio, rama en que la que los residentes chinos tenían importantes intereses.

Al mismo tiempo que se iniciaban las conversaciones, Pekín y Hanoi intercambiaron también sendas notas de protesta en la que se acusan mutuamente de nuevos incidentes entre los dos países. China acusa a Vietnam de una presunta incursión vietnamita al otro lado de la frontera y Vietnam acusa a China de que agentes suyos incitaron a refugiados chinos a que atacasen a milicianos vietnamitas para robarles las armas, hecho ocurrido días atrás en la estación ferroviaria de Hanoi.

Mientras tanto, Vietnam ha lanzado una ofensiva diplomática en el sureste asiático. Ayer fue anunciada en Hanoi la próxima visita a Tailandia del primer ministro vietnamita, Pham Van Dong.