Atentado frustrado contra el presidente de Nicaragua, general Anastasio Somoza
Un grupo de activistas identificados atentó ayer con cohetes contra dependencias de la Guardia Nacional de Nicaragua, donde el presidente, Anastasio Somoza, celebraba una reunión con su Gabinete. En dependencias contiguas se hallaba el hijo del presidente y jefe del Ejército nicaragüense, coronel Anastasio Somoza III. Según las primeras informaciones, ambos resultaron ilesos, si bien, tras los atentados, una persona murió y otras dos resultaron heridas.Los acontecimientos se desarrollaron desde la planta séptima del hotel Intercontinental, de Managua, donde dos personas, al parecer un hombre y una mujer, se inscribieron como matrimonio y ocuparon una habitación cuyas ventanas dan sobre las dependencias militares, instaladas sobre la zona denominada Loma de Tiscapa. Desde la habitación, la pareja montó un dispositivo para lanzar cohetes, que accionaron con un mecanismo retardado que les permitió disparar una vez abandona da la habitación.
La situación se agrava
La situación política y social se ha agravado agudamente en las últimas semanas en Nicaragua, al tiempo que se han intensificado las acciones del Frente Sandinista de Liberación Nacional, a cuyos militantes se atribuye este ataque. En el país opera ya un Frente Amplio Opositor, que ha aglutinado a todas las fuerzas políticas que se oponen a Anastasio Somoza y buscan una alternativa que implante en el país la democracia y el respeto a los derechos humanos, sistemáticamente vulnerados por el régimen de Managua, según manifestó a EL PAÍS Luis Carrión, financiero nicaragüense dirigente del Banco de Nicaragua y uno de los más destacados líderes del Movimiento Democrático Nicaragüense que encabeza Alfonso Robelo.Para el banquero Luis Carrión. Nicaragua experimenta hoy la insatisfacción política de su pueblo, acumulada tras cuarenta años de somocismo. Todas las huelgas que se registran en el país, añade, son políticas y se orientan hacia el relevo del dictador, quien desde que sobrevino el trágico terremoto de 1972 inauguró un verdadero festín de corrupción, agrega Luis Carrión. La empresa privada fue muy dañada y el país sufre una progresiva descapitalización, y los primeros que evaden capital de Nicaragua al extranjero son los propios somocistas, dice el financiero nicaragüense.
En cuanto a las salidas políticas que se barajan para el país, Luis Carrión indica que Somoza se encuentra en un callejón sin salida política alguna. «Quizá Somoza tenga un rasgo de patriotismo -agrega el dirigente del MDN- y se quite políticamente de en medio para evitar ese río de sangre que se avecina.» Respecto al papel del Frente Sandinista, Carrión señala que hay que contar necesariamente con el Frente para pacificar el país, si bien electoralmente considera que los sandinistas no van a tener peso.
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