Se conoce la firma del contrato de compra de 48 aviones Mirage F1

La firma del contrato de compra de 48 aviones Mirage F-1 para el Ejército del Aire español a la empresa francesa Marcel Dassault Breguet, se ha conocido con carácter definitivo -la decisión fue tomada hace meses- pocos días antes de la llegada a España del presidente francés, Valery Giscard d'Estaing, lo que refuerza la impresión de las connotaciones políticas que ofrece la operación.El tema se aireó extensamente en los meses de enero y febrero últimos, al conocerse la decisión de compra por parte de España, posponiendo la opción de los 72 F-16 norteamericanos, prevista en los tratados de cooperación entre ambos países. Ya entonces se señalaron las ventajas tácticas y económicas que la compra suponía y que se concretan, fundamentalmente, en un incremento sustancioso para la industria aeronáutica española, que participará hasta un 20 % en la fabricación de piezas y repuestos de los aparatos, y el compromiso francés de promover la venta de aviones españoles en Africa y América Latina. Pero junto a esos aspectos tecnológicos y económicos, Francia presionó con ofertas de tipo estrictamente político y que incluían su postura frente a la petición española de ingreso en la Comunidad Económica Europea (CEE), la política general mediterránea de ambos países y el papel del país vecino en los acontecimientos del norte de Africa que implican a la política exterior española.

La operación de compra de los 48 Mirage F-1 supone una inversión aproximada de ochocientos millones de dólares (unos 64.000 millones de pesetas) y no significa que el mercado español posponga definitivamente las ofertas de la industria norteamericana, competidora inmediata de la francesa en el mercado internacional aeronáutico, ya que en la década de los ochenta nuestro país habrá de afrontar la sustitución de los viejos phantom. La entrega de los F-1 será escalonada y se desarrollará entre 1980 y 1982. En la actualidad, el Ejército del Aire cuenta con quince F-1 que se encuentran en la base de Los Llanos (Badajoz). Los norteamericanos no parecen haber presionado excesivamente, aunque ésta sea una reproducción a pequeña escala del que se llamó contrato del siglo, por el que vendieron sus aviones a países europeos frente a la competencia francesa -ya que confían en vender a España cohetes, helicópteros y un costoso sistema de radar aerotransportado. Pese a esta compra del Mirage F-1, España sigue por debajo de la media internacional respecto a su potencial aéreo: Rusia , Estados Unidos cuentan con 35 aviones por cada millón de habitantes; países no alineados, veintitrés aviones por millón de habitantes; países de la NATO, diez aviones por millón de habitantes, mientras España cuenta con cuatro. Supuesto que el Ejército del Aire no contará con estos nuevos aparatos hasta 1982 y que el resto de los países incrementarán en ese período su actual potencial, España seguirá ofreciendo cifras muy inferiores a la media internacional.