Victoria sin brillo de Italia
Italia jugó frente a Austria el peor de sus encuentros del Mundial. incomprensiblemente, los Italianos encontraron ante los austríacos muchas más dificultades de las que cabía suponer. Sólo al final del encuentro volvieron a mostrar su auténtico potencial. La victoria con todo, la merecieron.Austria varió un tanto su sistema de juego a fin de romper la sólida defensa italiana. Krankl, que suele actuar de auténtico rompedor, trató esta vez de atraer hacia el centro de¡ campo a su marcado; y ello, indudablemente, creó algún desconcierto entre los defensores azules. Gentile, que es una de las piezas básicas del conjunto de Bearzot, distribuyó durante el primer período sus esfuerzos entre Krankl y Kreuz porque Bellugi no se sentía muy firme. En la segunda parte, con Cuccuredu, ya se movió con menos dificultades para controlar a Kranki..
Hubo, además, dos detalles significativos en el fútbol titubeante de Italia: Bettega, que andaba algo tocado, no pudo desenvolverse con su habitual facilidad, y solamente cuando fue sustituido recuperó Italia fortaleza atacante. Por otro lado, Benetti tuvo una hora de juego inoperante y ello rompió a la escuadra azzurra por la zona de mayor empuje. Benetti únicamente tocó el balón en tres ocasiones durante el primer cuarto de hora del segundo período y en dos cometió falta.
Italia se vio sorprendida en la reanudación por un juego más ofensivo por parte austriaca y estuvo a punto de perder los papeles. En el minuto dieciocho faltó bien poco para que se produjera el empate, y fue probablemente este susto el que abrió los ojos a los italianos y les sacó de su sopor. Hasta los diez minutos finales hubo un mano a mano firme de ambos bandos y el público que había llegado a protestar, pudo divertirse en aquel toma y daca que amenazaba con un marcador angustioso para los favoritos.
Los diez últimos minutos fueron de agobio para Koncilia; que vio cómo Cuccuredu, Graziani y Tardelfi disponían de magníficas situaciones para aumentar la cuenta goleadora.
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