El día 24 se abrirán al público los jardines del Campo del Moro

El próximo día 24 de junio, fecha de la onomástica del rey Juan Carlos, y como obsequio a los madrileños, serán abiertos al público los jardines del Campo del Moro, situados a las espaldas del Palacio Real. La apertura de los jardines obedece a una decisión personal del Rey «y viene a ser un testimonio del afecto que siente por todos y su preocupación hacia cualquier problema, por pequeño que sea».

El Patrimonio Nacional ha realizado algunas obras de acondicionamiento en colaboración con el Ayuntamiento de Madrid, quien se ha comprometido a seguir prestándola en el futuro.Los jardines del Campo del Moro, por su localización céntrica, su extensión y su belleza, han sido reivindicados en los últimos meses por las entidades ciudadanas, ecológicas y Adelpha, para que pasaran a ser zona de uso público. En aquel momento el Patrimonio expuso que la apertura no sería posible, ya que los jardines se utilizan también como acceso al Palacio Real en los días que se celebran actos oficiales Parece que esa dificultad ha sido superada, aunque podría ser que los jardines, por su proximidad a Palacio Real, tuvieran algunas limitaciones de uso o protección especial que aún no se conocen.

Los jardines del Campo del Moro ocupan una extensión similar a la quinta parte del Retiro y se extienden por una ancha franja irregular que llega desde la plaza de España Gardines de Sabatini, actualmente abiertos al público hasta las ocho de la tarde) hasta casi la ribera del Manzanares (parque de Atenas, también de uso colectivo). La extensión entre ambos permanece cerrada al público desde que los jardines revirtieron al Patrimonio Nacional en 1940. Nueve años antes, el 20 de abril de 1931, el Gobierno de la II República los había cedido al Ayuntamiento de Madrid.

Los jardines datan de la época de Felipe II, aunque han sufrido cambios, ampliaciones, degradaciones y posterior reconstrucción. Actualmente, su trazado y ornamentación es el de un jardín de estilo inglés decimonónico, calificado como conjunto histórico-artístico. Su última reconstrucción, respetando el estilo aludido, se inició en 1958, por decisión del Patrimonio Nacional.