Nuevos enfrentamientos entre guerrilleros somalíes y tropas etíopes

Por segunda vez en el curso de una semana, los guerrilleros somalíes informaron haber librado un importante combate con fuerzas etíopes en una evidente reavivación de la intensa guerra que tuvo como escenario la disputada región deOgaden.

Radio Mogadiscio informó que los guerrilleros dieron muerte a quinientos soldados etíopes y destruyeron doce carros de combate el pasado 29 de mayo, en la localidad de Duriyo, situada a unos catorce kilómetros de la frontera entre Etiopía y Somalia.La emisora, citando al periódico insurgente Danab, informó asimismo que 48 soldados soviéticos y cubanos resultaron muertos cuando acudieron en ayuda de los etíopes. Se dijo que perdieron un carro de combate y un vehículo blindado.

La radio indicó que en otro combate librado el sábado cerca de la localidad de El Kaarey resultaron muertos 250 soldados etíopes y fueron destruidos seis vehículos blindados.

Fuentes diplomáticas informaron hace una semana que el grueso de las fuerzas cubanas destacadas en Etopía -cuyos efectivos se calculan en unos 17.000 hombres- fueron desplazadas de la zona de Ogaden a los límites con la provincia norteña de Eritrea.

El Gobierno etíope combate a los rebeldes secesionistas en Eritrea y se han producido indicaciones de que podría desencadenarse en breve una importante ofensiva contra los mismos.

Después del término, en el mes de marzo, de la guerra del Ogaden, de ocho meses de duración, cuando Somalia anunció que estaba procediendo a retirar sus fuerzas ante el poderío cubano y soviético, no se produjeron indicaciones de que quedaban en el territorio algunos soldados para continuar la lucha en una guerra de guerrillas.

Los somalíes arguyen que los guerrilleros son combatientes libres que habitan en las zonas étnicas somalíes del Ogaden, pero fuentes del servicio secreto occidental creen que una gran parte de los efectivos guerrilleros lo constituye un batallón de soldados regulares somalíes reequipados para la guerra de guerrillas.

Etiopía amenazó con invadir Somalía si proseguían los ataques de los guerrilleros a través de la frontera, pero los somalíes prometieron seguir luchando y el Gobierno de Mogadiscio se comprometió a facilitar apoyo material y moral a los guerrilleros.