El obispo Muzorewa continúa en el Gobierno provisional rodesiano

El obispo Muzorewa permanecerá en el Gobierno cuatripartito provisional rodesiano, a pesar de sus repetidas amenazas de abandonarlo a raíz del cese forzoso del coministro de Justicia por él designado.La decisión de Muzorewa, adoptada tras una reunión de más de ocho horas del comité ejecutivo de su partido, el Consejo Nacional Africano Unido (UANC), resuelve temporalmente la primera grave crisis del poder interino y supone una victoria para el primer ministro blanco, Ian Smith.

El precio del compromiso, sin embargo, es una profunda escisión en el partido del obispo metodista, cuyos militantes más jóvenes consideran injustificable la marcha atrás de Muzorewa. Fuentes londinenses próximas al consejo ejecutivo rodesiano sugerían ayer que la decisión del jefe nacionalista moderado le enajena definitivamente el apoyo de sectores de la población negra que habían hecho una cuestión de principio de la reposición en su cartera del coministro de Justicia, Byron Hove, que fue cesado a raíz de unas declaraciones en las que criticaba la persistente discriminación racial en Rodesia y en las fuerzas policiales en particular.

La nota oficial emitida por el partido del obispo afirma que la decisión de permanecer en el Gobierno se ha tomado «para no causar el colapso del acuerdo interno y en beneficio del país».

La declaración califica de «poco claro» el comportamiento de algunos miembros del poder interno y asegura que el UANC «limpiará el aire político de Zimbabwe del desagradable olor que ha dejado la dimisión forzada de Byron Hove». La retórica del comunicado no oculta las tensiones generadas durante su redacción ni el hecho de que hayan sido necesarias ocho horas para poner de acuerdo, puertas afuera, a los miembros del comité ejecutivo del partido.

Según todas las informaciones, el propio Muzorewa y su vicepresidente, James Chikerema, habrían impuesto la tesis de que apiñarse en torno al «acuerdo interno» firmado en marzo es la única vía abierta para el UANC hacia una parcela del poder futuro y la sola manera de evitar el fatal aislamiento político de esta formación moderada.

En la capital británica el presidente de Zambia, Kenneth Kaunda, que sostiene con el primer ministro James Callaghan conversaciones que pueden ser decisivas para el futuro rodesiano, no se ha mostrado sorprendido por el paso dado por Muzorewa. Para el líder africano «no se puede descartar la presencia de soviéticos y cubanos en Rodesia como acontecimiento final de una serie que comenzó hace doce años... hace mucho tiempo que el conflicto de Zimbabwe se internacionalizó con la presencia de miles de mercenarios extranjeros junto al ejército de Ian Smith».

Kaunda, que presiona a Londres y Washington para que adopten una postura activa en contra del «auerdo interno» rodesiano, describió el intento de transición organizado por Ian Smith como una «receta perfecta» para una guerra civil.