No hubo acuerdo entre la dirección de Ascon y los sindicatos sobre los despedidos

En la nueva tanda de negociaciones entre CCOO, UGT y USO con la dirección de Ascon, bajo el arbitrio del Ministerio de Trabajo, no se ha alcanzado acuerdo. La empresa mantiene dieciocho despidos, de ellos, ocho cargos sindicales a los que acusa de coaccionar a sus compañeros durante el paro del 22 de febrero, y otros diez por su participación en los incidentes registrados a la salida de un juicio en Magistratura de Trabajo. Las centrales solamente admiten negociar de cuatro a ocho despidos. Se celebrará una nueva reunión la próxima semana.Ha habido acuerdo, condicionado a la resolución total, sobre el expediente de regulación de empleo que afectará a 121 empleados, que en lugar de ser definitivo tendría una vigencia de dieciocho meses.

El conflicto de Ascon se mantiene desde hace doce semanas a raíz del paro de buena parte de los 1.850 trabajadores de las dos factorías en solidaridad con un compañero despedido por entrevistarse con un encargado. El despido fue confirmado por Magistratura, que consideró improcedentes siete de los 37 despidos registrados a continuación.

Los próximos días pueden ser decisivos en materia de orden público, alterado en numerosas ocasiones desde que comenzó el conflicto. El gobernador civil de Pontevedra, que ha consentido numerosas asambleas informativas en el estadio de fútbol de Balaídos, ha resuelto que no se celebren más, a no ser que se cumplan las disposiciones en materia de reunión, no obstante lo cual el comité de huelga ha hecho una nueva convocatoria para mañana lunes. El gobernador civil ha considerado que en este momento cualquier incidente callejero puede entorpecer la resolución del conflicto.

El comité de huelga ha elaborado un amplio informe en el que afirma que Ascon no está en crisis, sino que potencialmente es una de las empresas más rentables del sector, lo que justificaría que si el grupo Pérez Maura no consigue buenos resultados, fuera nacionalizada o pasara a control del INI.

Por otra parte, la dirección de Ascon presentará una denuncia ante la jurisdicción ordinaria por difusión de datos de su balance que considera secretos. Al parecer, mantiene el criterio de que algunas cifras dadas a conocer por el Partido Obreiro Galego, no legalizado, en una asamblea de trabajadores permitirán a la competencia tener conocimiento de interioridades de la empresa que la perjudica. Ascon, que se encuentra en suspensión de pagos, ya presentó otra denuncia por vía judicial contra líderes obreros por coacción, manifestando que durante el paro del 22 de febrero se impidió a varios directivos abandonar la factoría de Vigo.