Persiste el desacuerdo entre UCD y la izquierda en la ponencia de Acción Sindical

El disenso entre UCD y la izquierda parlamentaria sobre el proyecto de ley de regulación de los órganos de representación de los trabajadores en la empresa -más conocido por acción sindical en la empresa- se mantenía ayer en el seno de la ponencia encargada de informarlo, en la que UCD no es mayoritaria. Además de la discrepancia radical sobre el artículo nueve -funciones de los comités de empresa-, ayerse intentó llegar a un acuerdo sobre el número de horas a justificar por los representantes sindicales para ejercer su cometido y sobre la constitución de secciones sindicales en la empresa. La solución de los puntos en conflicto se resolverá en la Comisión de Trabajo del Congreso, que iniciará los debates el día 25.

Asimismo, UCD propuso -frente a la tesis socialista de creación de secciones sindicales en todas las empresas- que sólo en las de plantilla superior a quinientos trabajadores fijos «aquellos sindicatos que acrediten un mínimo de afiliados superior al 10% de la plantilla del censo, o al 20% de la de uno cualquiera de los colegios electorales, podrán constituir secciones para divulgar entre sus afiliados en el propio centro de trabajo la actividad del sindicato», siempre sin perjudicar la normalidad de la producción y con otras cautelas.Por lo que se refiere a las supuestas negociaciones de UGT con la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), uno de los miembros de la ponencia, el socialista señor Chaves, negó que se hubiera producido y aseguró que en las conversaciones mantenidas ayer con la CEOE sólo se realizó un intercambio de criterios sobre problemas laborales en general, ya que tanto UGT como CCOO -que hoy conversará también con miembros de la CEOE- consideran innegociable el proyecto de ley citado, fuera del ámbito parlamentario en que se encuentra. Las manifestaciones posteriores, en los pasillos del Congreso, del líder de CCOO Marcelino Camacho, quien llegó a acusar de chantaje a la gran empresa, hará prever la unidad de la izquierda sindical y parlamentaria en este punto.