_
_
_
_
Pleno del Congreso

La Oposición reserva su opinión sobre el discurso presidencial

Decepción en las filas del PSOE y de Alianza Popular y aceptación sin adjetivos y sin euforias en el resto de las minorías, con excepción de la de UCD, fueron las primeras reacciones registradas en los pasillos del Congreso apenas terminado el discurso del presidente Suárez.

Desde el «no ha habido discurso» de Manuel Fraga (AP), hasta la frase poco amable del diputado de Euskadiko Ezkerra Francisco Javier Letamendía, «voy a proponer a mi vuelta a Euskadi el discurso de Suárez como el mejor chiste del año», las opiniones en torno al parlamento del presidente fueron para todos los gustos, si bien la prioritaria se hacía eco de que se esperaba mucho más del discurso de Adolfo Suárez, toda vez que hacía ya bastantes meses que no se dirigía al Parlamento ni a la opinión pública.Felipe González rehusó reiteradamente comentar el discurso, si bien dejó traslucir que el mismo no le había agradado, por vago e impreciso, y, aún más, que ello era bueno para la estrategia del PSOE de cara a la posible intervención, hoy, del número uno del Partido Socialista, y de cara a los acontecimientos de las próximas semanas. Alfonso Guerra, algo más explícito, comentó que el discurso parecía una copia en su esquema del pronunciado hace algunas semanas por el primer secretario del PSOE en el Club Siglo XXI, y que aun sin estar de acuerdo con las palabras de Suárez parecía como si éste quisiera situarse por encima de su propio Gobierno.

El socialista Enrique Múgica, por su parte, manifestó: «El presidente nos tiene acostumbrados a su repertorio de buenas intenciones. No varía en semántica ni en contenido de anteriores discursos, sigue sin explicar el cese de los ministros, aunque menos mal que tenemos las declaraciones de Fuentes Quintana en el Club Siglo XXI. Tampoco ha desarrollado la pormenorización del programa económico. Lo único bueno es que da la razón a Felipe González en que la política española tiene que estar enfocada hacia Europa, Latinoamérica y Mediterráneo y ha confirmado las sospechas del Partido Socialista de que los procesos preautonómicos carecen de sentido.»

La respuesta de Manuel Fraga fue contundente: «No ha habido discurso, a pesar de la hora larga de parlamento. Esperábamos un programa concreto de actuación política, y no lo ha habido. Además, ha habido una declaración muy importante, que es la de que aún no se puede gobernar. »

«Me parece - Silva Muñoz -un discurso desdramatizador, que es precisamente lo que se pretendía. Considero que es equilibrado, prudente y técnico, por lo que ha hecho recordar algunos de los discursos de las pasadas Cortes franquistas. En el tema económico coincido con el presidente en que es poco el tiempo para salvar la crisis, pero discrepo en que la crisis haya llegado a los españoles. La crisis está en las empresas. En el plano político coincido en que hay que ir cuanto antes a la Constitución, pero lamento que no se haya hecho más hincapié en la unidad de España.»

La política de consenso, punto fuerte para los comunistas

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Santiago Carrillo rehusó de pleno hacer cualquier comentario. Sánchez Montero, a título personal, mostró su satisfacción por el hecho de que Suárez recalcase el punto de la política de consenso, tónica general entre los parlamentarios comunistas. Más explícito fue Gregorio López Raimundo, presidente del PSUC, quien afirmó: «Creo que es un discurso muy bonito e interesante, pero que aporta pocas innovaciones, seguramente porque la situación política no se presta a originalidades. Destacaría como muy positivo el que el presidente haya insistido en la necesidad de hacer una política de consenso.»

Al término del discurso del presidente y antes de la intervención del vicepresidente Abril, todos los jefes de fila parlamentarios se mostraron completamente reservados sobre su intervención en el debate que sobre el discurso de Suárez proseguirá hoy. EL PAIS ha podido saber que Adolfo Suárez tiene la intención de participar en la tarde de hoy en el citado debate.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_