_
_
_
_

Berlín discrimina contra los extranjeros

Tres distritos urbanos de Berlín, que conservan la estructura urbana berlinesa anterior a la segunda guerra mundial, están prohibidos para los extranjeros de lengua materna no alemana. Justificación oficial: estos distritos superan ya el cupo del 10% de habitantes foráneos, considerado como límite de tolerancia sociológica. Son lo que comúnmente se llaman ghettos de Gastarbeiter.Para la opinión pública alemana, esta situación es resultado directo del deseo de ahorro de los extranjeros, como de sus pequeñas ambiciones con respecto a la calidad de vivienda. Sin embargo, un estudio sociológico del Consejo de Europa, dado a conocer recientemente, contradice esta opinión generalizada.

Según este estudio, a nivel europeo, los emigrantes pagan entre el 20% y el 30% más que los demás por casas que generalmente están en peor estado.

Pero estos alquileres no animan a los propietarios a efectuar trabajos de mantenimiento imprescindibles. El resultado es la paulatina pérdida de valor de barrios enteros y la consecuente mudanza de los nativos hacia otros sectores de las ciudades. Ancianos y extranjeros configuran la imagen de esos tres barrios berlineses citados: ellos son los que, por la discriminación o la falta de medios económicos, no encuentran otro sitio más agradable para vivir.

En el proyecto de reforma de la ley de Extranjeros, negociado entre organismos gubernamentales centrales y federales, se había incluido una nueva condición para la extensión, tras cinco años de residencia en la República Federal, del derecho ilimitado de residencia. El inquilino debe, según el proyecto de ley, saber expresarse en alemán.

Teniendo en cuenta las condiciones de vida y trabajo de los extranjeros, portavoces del sector eclesiástico habían protestado contra lo que podía ser una nueva puerta abierta a la discriminación. Existía el interrogante de si se iba a hacer pasar un examen a los extranjeros, y por quién.

Los temores se confirmaron en cierto sentido: una institución ha recibido el encargo de confeccionar cursos de alemán comprendiendo los exámenes finales correspondientes.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_