Sin avances sobre problemas de fondo en torno a Gibraltar
Los ministros español y británico de Asuntos Exteriores, Marcelino Oreja y David Owen, concluyeron anoche una nueva ronda de conversaciones sobre Gibraltar sin dar prácticamente ningún paso adelante, sobre los problemas de fondo, en relación con la reunión el pasado 24 de noviembre en Estrasburgo.
Las conversaciones tuvieron lugar en el Chateau de la Muette de París, sede de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE), y a ellas asistieron, integrados en la delegación británica, el ministro principal de Gibraltar, sir Joshua Hassan y el jefe de la oposición de la colonia, Mauricio Xiberras.Después de tres horas y media de conversaciones -una hora y media más de lo previsto- las dos delegaciones hicieron público un breve comunicado donde se reconoce la necesidad, como ya ocurrió en Estrasburgo, de continuar estas conversaciones. En este sentido se acordó celebrar una reunión antes del final de verano, en un lugar todavía no fijado.
Según declaraciones de la delegación británica, podría abordarse la conveniencia de que estas reuniones no se celebrasen ya en un país neutral, sino en Londres o Madrid.
Prácticamente el único progreso en relación con la reunión de Estrasburgo está en el hecho de que las dos delegaciones decidieron la creación de grupos de trabajo mixtos para estudiar diversas materias.
Así, dos de las comisiones estudiarán el problema de las comunicaciones telefónicas y marítimas entre Gibraltar y España, lo que parece una concesión a la población gibraltareña, y una tercera se encargaría de estudiar el tema de las pensiones y seguros sociales de los antiguos trabajadores españoles en la roca, lo que significa. una concesión a la delegación española.
En estas comisiones se respetaría el mismo esquema de delegaciones presentes en las conversaciones de Estrasburgo y de París. Es decir, participarían representantes de la población gibraltareña integrados en la delegación británica.
Según declaró Sir Joshua Hassan a EL PAIS, el estudio para la composición de estos grupos de trabajo deberá estar concluido para la reunión que debe tener lugar antes del final del verano.
A pesar del escaso avance logrado, las dos delegaciones, así como los representantes gibraltareños, coincidieron en que en esta reunión se había avanzado en el camino de establecer un clima de confianza que facilite la continuación de los contactos.
«No se han dado pasos adelante, pero se ha creado un clima propicio para darlos en el futuro», afirmó Sir Joshua Hassan. Tanto este como Mauricio Xiberras aparentaban, al final de las discusiones una moderada satisfacción. Xiberras, que mantuvo una posición muy dura en las conversaciones de Estraburgo, afirmó que las conversaciones de París «transcurrieron según el mismo tenor» que las de Estraburgo.
«Se necesitarán muchos años -dijo- para sentar las bases desde las que encarar una posible solución.»
Para Marcelino Oreja, quien tenía previsto su regreso a Madrid anoche mismo, «mientras que en Estraburgo se miró -más al pasado, en esta reunión hemos mirado más al futuro».
Entrevista con Guiringaud
El ministro español se había reunido, en la noche del martes, con su colega francés, Louis de Guiringaud, en una cena de trabajo que se prolongó durante tres horas.Según fuentes oficiales, el señor Oreja transmitió a su colega francés la preocupación del Gobierno español por la actitud francesa respecto de las actividades de la flota pesquera española del Norte en aguas del país vecino y en relación con las prácticas proteccionistas de la Comunidad Económica Europea, que afectan a productos españoles.
En las conversaciones habría ocupado también un espacio importante, según otras fuentes, la conflictiva situación del norte de Africa.
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