El Consejo General Vasco solicita la paralización del suministro de uranio

Nombrar una comisión de encuesta para esclarecer las recientes actuaciones de grupos incontrolados en San Sebastián y solicitar al Gobierno que no autorice el suministro de uranio enriquecido a la central nuclear de Lemóniz hasta que el Consejo General se pronuncie en torno a este tema, fueron los dos acuerdos más importantes alcanzados ayer por este organismo preautonómico en la reunión que celebró en Vitoria.Los resultados que obtenga la comisión de encuesta serán elevados a las autoridades competentes del Estado para el exacto cumplimiento de la ley, pero el propio Consejo General se reserva también su posible utilización. A fin de que cualquier persona pueda aportar información en torno a este caso se instalará una oficina específica en la Diputación de Guipúzcoa.

El consejero del interior, José María Benegas, explicó las causas de que se crease una comisión de esta naturaleza en la desconfianza que siente el ciudadano en ocasiones. «Sucesos como los ocurridos estos días en San Sebastián se suceden sin que se produzca una detención. Se trata de hechos muy graves y, además, es preciso su esclarecimiento porque hay distintas versiones. Nos hemos impuesto un plazo corto de una semana para que no se eternice el trabajo y no ocurra, como ya ha pasado, que sus resultados no lleguen a conocerse.»

El señor Benegas ha afirmado que en el terreno de la violencia constituyen el único problema, ya que también inciden en él las acciones de algunos grupos políticos que defienden la lucha armada y algunas intervenciones desproporcionadas de las fuerzas de orden público.

Sobre el tema de la energía nuclear, el Consejo reconoce la existencia de un amplio sector del pueblo vasco contrario a su utilización, pero al mismo tiempo admite que hay un grave problema de abastecimiento energético. A la vista de ello acuerda solicitar informes de la máxima garantía técnica y nombrar una comisión de seis consejeros que coordine los trabajos y convoque con urgencia a Iberduero y a una representación de los comités antinucleares.