El contrato laboral para los docentes intenta subvertir la Administración
«Al tratar del acceso a la docencia sólo se advierte una actitud más o menos generalizada de contestación al sistema de oposiciones; pero desde el mes de agosto pasado, en que quedó constituido el nuevo equipo ministerial, no se ha recibido ni una sola propuesta de alternativa concreta al sistema de oposiciones por parte de los grupos políticos o profesionales», afirmó el director general de Personal de Educación y Ciencia, Matías Vallés, en un coloquio celebrado ayer en el colegio mayor San Pablo.El acto estuvo organizado por la Secretaría de Acción Cultural de UCD y al mismo fueron invitados representantes de diversas organizaciones profesionales de profesores de todos los niveles, con la notable y paradójica ausencia de las asociaciones de profesores de escuelas universitarias y, en concreto, de las escuelas de formación de profesorado de EGB, a pesar de que el tema de la mesa redonda (Problemas de la carrera docente), les afectaba más que a nadie.
El señor Vallés calificó la reivindicación del contrato laboral para los docentes como una clara opción política encaminada a subvertir toda la maquinaria de la Administración del Estado y señaló que la aceptación de esta fórmula frente a la del funcionariado sería introducir un grave elemento diferenciador entre un cuerpo tan numeroso como el docente y el resto de los servidores de la Administración. Indicó, en otro momento, que va siendo hora de ocuparse en profundidad del tema de la calidad de la función docente, pues existen evidentes síntomas de cansancio en la opinión pública ante la excesiva importancia que se está concediendo a las cuestiones del acceso y de la estabilidad.
No obstante, el director general de Personal rechazó la acusación de parodia con que uno de los participantes calificó a las fórmulas que se han arbitrado para las próximas oposiciones y que han sido publicadas hace dos días en el BOE, e indicó que se trata de un procedimiento racional y justo pensado para todos aquellos profesores interinos que llevan muchos años en la docencia y tienen merecido derecho a la estabilidad.
Con una fuerte ovación de gran parte del público asistente fueron recibidas las palabras de Andrés de la Oliva, secretario de la Asociación Independiente de Profesores Universitarios (AIPU) al pedir públicamente la dimisión del secretario de Estado para la Universidad, señor González Seara, por considerar inadmisibles sus recientes declaraciones en Barcelona en el sentido de calificar como modélica a una Universidad cuya actitud en el tema del acceso a la docencia de los profesores está contraviniendo gravemente la legalidad.
En relación con las oposiciones, hubo un general consenso en admitir que es necesario su racionalización, pero en modo alguno su supresión, porque, según se dijo, un sistema de selección será siempre necesario. A este respecto, el señor De la Oliva precisó que habría que ver si quienes defienden el contrato laboral lo seguirán haciendo cuando este concepto se separe de la pretensión de muchos PNN nombrados a dedo, de acceder a la estabilidad sin ningún tipo de pruebas.
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