Hoy será presentado a los partidos el nuevo programa Andreotti

El primer ministro, Giulio Andreotti, encargado de formar nuevo Gobierno, concluyó ayer por la tarde su segunda ronda de conversaciones exploratorias con los partidos. La delegación democristiana le entregó a última hora de la tarde el borrador de programa económico que Andreotti tendrá que someter hoy a los partidos interesados.El calendario de esta crisis es lento y sin fechas fijas. Para alcanzar la fórmula anterior de Gobierno monocolor, basada en la abstención o «no desconfianza» de los partidos del «arco constitucional», fueron necesarios más de dos meses de conversaciones. Otro tanto o más se empleará para congeniar ahora otra fórmula en la que los comunistas apoyen un programa, sin que por ello participen en una mayoría política.

Andreotti recibió ayer a la delegación de los partidos Republicano y Liberal. Anteayer lo hizo con comunistas, socialistas y socialdemócratas. Las posiciones de los partidos no han cambiado sustancialmente.

El secretario del Partido Socialista, Bettino Craxi, habló, tras su entrevista con Andreotti, de una «mayoría parlamentario pero los socialistas no quieren abandonar una mayoría de carácter político con los comunistas, y, a la vez, no quieren irritar a la Democracia Cristiana, con el objeto de evitar a toda costa el trauma de elecciones anticipadas. Los socialdemócratas están dispuestos a participar en la mayoría propuesta por la Democracia Cristiana. Los republicanos insisten, sobre todo, en la coherencia del programa y en su respeto riguroso. Los liberales se proponen, por ahora, participar en las negociaciones sobre el programa, pero, salvo imprevistos, negarán la confianza a un Gobierno que sea apoyado parlamentariamente por los comunistas.

El nuevo programa

El programa sobre el que se discutirá de nuevo, pero sobre el que todos, prácticamente, están de acuerdo, tendrá como puntos fundamentales evitar el referéndum sobre el aborto y el Concordato, de dar una mínima solución a los problemas del paro, el saneamiento de las empresas y el orden público. Un comité de garantes, formado por los líderes de los grupos parlamentarios de los seis partidos del «arco constitucional», controlará el programa y solicitará su aplicación. Este comité limitará, de hecho, los poderes del Gobierno. El problema consiste en distinguir su función política de su función técnica y cómo firmar la moción de confianza al Gobierno que Andreotti forme con un programa aceptado por los seis partidos. Se habla ya de firmar cada partido autónomamente, como voto «adjunto», y no colegialmente, como mayoría formal. Si un partido votara contra el Gobierno, éste no caería, porque ningún partido aislado es determinante, ni siquiera el comunista. Si, en cambio, se firma colegialmente, todos gozan de igual dignidad democrática y un partido tan en los huesos como el Liberal podría provocar la crisis.