Polanski, perseguido por un tribunal norteamericano, se refugia en París
El director cinematográfico Roman Polanski escapó ayer de Estados Unidos, trasladándose a París, para evitar una probable condena de varios años de cárcel, que le iba a ser impuesta por un tribunal de California, por haber cometido estupro y abusos sexuales con una niña de trece años.
Polanski se encontraba en libertad bajo fianza. La sentencia, que podría alcanzar hasta cincuenta años de cárcel, y que podría incluir también la deportación de Estados Unidos, iba a ser dictada ayer por un tribunal de Santa Mónica, California.
El abogado de Polanski dijo al juez que su cliente le había manifestado su intención de no asistir, y dijo que creía que Polanski había abandonado Norteamérica, pero se negó a revelar el lugar donde se encontraba su defendido.
Aunque de origen polaco, Roman Polanski tiene nacionalidad francesa, y presumiblemente se habrá refugiado en un país en el que no sea posible atender una demanda de extradición por delitos sexuales, como es el caso de Francia.
Polanski, de 44 años de edad, reside con frecuencia en la costa Oeste norteamericana, pero no posee allí una vivienda desde que su esposa, la actriz Sharon Tate, fuera asesinada, en 1969, por el grupo de Charles Manson. En la actualidad, Polanski estaba dirigiendo una nueva película, titulada Hurricane, y producida por Dino de Laurentis, quien, recientemente, anunció sus intenciones de rescindir el contrato a Polanski, porque era incierto el futuro del mismo.
Según la acusación fiscal, Polanski drogó, violó y sodomizó a una niña de trece años, el pasado mes de marzo, en casa de Nicholson, adonde había llevado a la muchacha para hacerle unas fotografías destinadas a una revista erótica francesa.
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