La "cumbre" de Trípoli acusa a Sadat, de sacrificar a los palestinos

La «línea dura» contra Egipto ,domina los conciliábulos de la «minicumbre» árabe de Trípoli, abierta ayer con veinticuatro horas de retraso para permitir la llegada de una delegación de la República Democrática y Popular del Yemen (Yemen del Sur).Los presidentes de Siria y Argelia, y el dirigente palestino Yasser Arafat han atacado las iniciativas del presidente egipcio Anuar el Sadat, al que acusaron de sacrificar la causa del pueblo palestino en aras de una paz separada con Israel. Según el jefe de la diplomacia argelina, Abdelaziz Buteflika, la conferencia tiene como único objetivo proceder a un análisis de los acontecimientos que han roto la cohesión tradicional del mundo árabe.

El secretario general del frente nacional de la RDP de Yemen, Abelfatah Ismail, ha sido el último dirigente árabe en unirse a los demás dignatarios que participan en la conferencia árabe restringida convocada por el presidente libio El Gadafi. Las diferentes. organizaciones palestinas han delegado también sus responsables.

El presidente sirio Hafed el Assad ha declarado que se propone solicitar a los demás participantes el examen de una serie de medidas prácticas para hacer frente a la situación que prevalece en Oriente Próximo, pero, en opinión de otras fuentes árabes la «minicumbre» se limitará a recomendar el estudio ulterior de una línea de acción que podría ser objeto de nuevas consultas en Bagdad la próxima semana.

La presencia de los líderes palestinos Yasser Arafat, Georges Habache y Nayef Hawameth se interpreta como un intento de la resistencia palestina de forzar la creación de un frente panárabe hostil a Egipto, en el cual las diversas fracciones de la resistencia se comprometerían a congelar sus desavenencias.

En opinión de los observadores, la postura extrema sería la adoptada por Irak, que reclama la ruptura de relaciones :diplomáticas con El Cairo, siguiendo en ese terreno a Libia.