Los medios seres
Ya sabía yo que con la caída de mi amigo Rafael Ansón se iba a notar en seguida una mejoría en la programación de TVE, pero no creía, realmente, que los efectos fuesen tan rápidos, pues resulta que ya están grabando Los medios seres, de Ramón Gómez de la Serna, para echarla por la pantalla esa.Como esta columna no me la pagan en el periódico más allá de los topes salariales del pacto de la Moncloa, aprovecho para hacer en ella propaganda de mis trabajos y mis días, que en este caso son los referidos a Ramón y las vanguardias, libro sobre el vanguardista español de los años veinte, que me trae loco todo el año. Los fines de semana me propongo trabajar mucho en el Ramón, pero luego me lo paso con el otro Ramón, o sea el gato, que me da mucha conversación y me come en la mano, como Azorín le comía a Maura o Ansón a Suárez, por poner un ejemplo más inmediato y que ustedes lo comprendan mejor.
En la mano o no, supongo que Ansón había dejado firmada esta grabación, que me parece que van a hacer en Barcelona (en Barcelona siempre son más ambiciosos culturalmente que aquí, en la metrópoli). Los medios seres, de Gómez de la Serna son unos actores que salen pintados mitad de blanco y mitad de negro. O mitad de negro y mitad normal, longitudinalmente. Toda una intuición sicológica de aquel gran intuitivo que renovó incluso una cosa tan irrenovable como la conferencia, según ha recordado Aranguren en reciente y bello artículo, en este periódico. Artículo en el que no me repartía discriminación ni reduccionismo, como en otros, cosa que debo agradecerle al quien con tanto respeto leo y cito siempre, sino que incluso se acordaba, en su general condena de ¡á cultura española, de un hombre. como Ramón, que, cuando menos, hizo saltar el protocolo español y letárgico de la conferencia. Ramón dio conferencias vestido de medio ser, pintado de negro en medio cuerpo y medio rostro, de arriba abajo. ¿Quiénes son hoy los medios seres de la política nacional?
Todos o casi.
Aranguren dice con gran verdad que la cultura y la política, hoy, son representación, cosificación de sí mismas, como de otra forma lo dice García Calvo, pero se les ha pasado añadir que son representación de medios seres, porque el otro medio suele estar en un funeral en Cuelgamuros, con una pancarta en la plaza dé Oriente, haciendo una necesidad en los excusados del Consejo Nacional del Movimiento o en una cacería con Arias Navarro, que aún le invitan a cacerías, así como Berlanga ha tenido el acierto de invitar a Francis Franco a la cacería cinematográfica de su Escopeta nacional,
Los cubicadores periodísticos a ojo han calculado entre medio millón y un cuarto de millón los franquistas asistentes a la plaza de Oriente el pasado 20, pero se les ha olvidado añadir los medios seres que no estaban allí, pero de buena gana hubieran estado, Arespacochaga, un suponer, que seguro que tiene medio ser en la alcaldía y otro medio en la Guardia de Franco.
Casi todos son hoy medios seres en la política nacional, porque aún les resta una mitad, no negra, como en Ramón, sino azul, un costado franquista y ministerial, aunque el otro costado lo den ya al viento bizarro de la democracia. Todo el Gobierno actual, diríamos, está compuesto de medios seres ramonianos: uno es medio demócrata y medio cristiano (Cavero), otro es medio demócrata y medio liberal capitalista (Garrigues), aquél de allá es medio demócrata y medio franquista (Martín Villa), y aquel otro de acullá es medio demócrata y medio seuísta (Suárez).
No les doy la lista completa por no cansar, pero ya ven que esta democracia no funciona, como me dice un chófer amigo que es socialista, porque es una democracia de medios seres que todavía tienen una mitad, longitudinal y ramoniana, cara al sol con la camisa nueva. Un Gobierno de medios seres sólo puede hacer una democracia a medias, que es todo lo contrario de una democracia. Pero lo que no hay que perderse es la obra de Ramón por la tele. Aunque a lo mejor luego no la dan porque hay partido.
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