Manifestaciones de agricultores contra la política del sector

Con una multa de 50.000 pesetas fueron puestos en libertad, a primera hora del domingo, los veinticinco miembros de la Coordinadora de Organizaciones Campesinas que efectuaron el sábado una sentada en la Moncloa en protesta por la política agrícola del Gobierno. Siguiendo el llamamiento de la Coordinadora a lo largo de esta semana se producen manifestaciones campesinas en diversas provincias. Ayer, concretamente, se realizaron en Cataluña, Zaragoza, Pamplona y Vitoria.

En toda Cataluña la Unió de Pagesos (UP), sindicato unitario del campesino catalán, organizó ayer manifestaciones que tuvieron un marcado carácter de oposición al pacto de la Moncloa y de solidaridad con la Coordinadora de Agricultores y Ganaderos del Estado español.Lérida fue la ciudad donde la reivindicación campesina alcanzó mayor fuerza (12.000 manifestantes), seguida de Tarragona (de cuatro a 5.000 manifestantes) y en un segundo lugar Gerona y Barcelona, con mil personas concentradas en cada uno de los casos.

En Barcelona, una comisión de treinta campesinos fue recibida por el gobernador civil. Posteriormente tuvo efecto una pequeña y pacífica «ocupación simbólica» de la Cámara Sindical Agraria de Barcelona. Según informa nuestro corresponsal en Lérida, en aquella ciudad se concentraron 12.000 agricultores que condenaron vivamente el pacto de la Moncloa, el actual sistema de cotización de la seguridad social agraria y, en general, la política agraria del Gobierno Suárez.

El representante de las Garrigas manifestó a EL PAIS «Se termina el seny, el diálogo y optimismo, porque la violencia no comienza en nosotros, sino en la propia Administración».

En la manifestación estaban presentes varios diputados leridanos, en representación de todos los parlamentarios de aquella zona, excepto Manuel de Zárraga (UCD).

En Tarragona se concentraron de cuatro a 5.000 agricultores de diversas comarcas. Muchos de ellos iban provistos de garrafas de aceite, en señal de protesta por la regulación de la campaña olivarera acordada por el Gobierno.

En Valencia se produjo una concentración de unos 10.000 campesinos convocados por la Unión de Llauradors y Ramaders. En Pamplona y Vitoria lo hicieron, respectivamente, 7.000 y 5.000 campesinos, según Cifra. En Zaragoza la concentración alcanzó la cifra de 10.000 personas, y en Lugo, dos centenares. En todos los casos se produjeron concentraciones y, posterior marcha hasta el Gobierno Civil, donde se entregaba un documento con las reivindicaciones específicas y generales de los campesinos.