Marruecos y los saharauis preparan conversaciones en un país neutral

Marruecos y el Frente Polisario se estarían preparando a iniciar nuevas negociaciones secretas en un país «neutral», que podría ser España, según se anticipó ayer a EL PAIS en medios bien informados de Rabat.

Las conversaciones efectuadas hace unos días en Dakar y París entre Rabat y el Polisario quedaron congeladas, tras una aparente negativa de Hassan II a romper su pacto militar con Mauritania. Diputados marroquíes de origen saharaui, que intervinieron en esos contactos, señalaron a este diario que el Frente Polisario, con el visto bueno del presidente argelino, Bumedian, deseaba, tal como sugirió Hassan II la semana pasada, que Marruecos le dejara «las manos libres» en Mauritania, a cambio del reconocimiento de la soberanía marroquí en el norte del Sahara occidental.Este plan habría sido sometido desde entonces a «modificaciones importantes» por el Frente Polisario y a una serie de contrapropuestas por parte de Rabat. En todo caso, su existencia no ha sido desmentida hasta ahora por Argelia o el Polisario. En las negociaciones de Dakar y París intervino Jalianna Rachid, ex secretario general del PUNS, presunto movimiento independentista creado por la España franquista antes de la descolonización del territorio.

Tanto el ministro de Asuntos Exteriores, Mohamed Bucetta, como el primer ministro marroquí, Ahmed Osman, entrevistados por EL PAIS durante las últimas horas, reiteraron que Marruecos «no negociará, de ninguna manera, la soberanía del Sáhara, incluido el Sahara mauritano», y que tampoco aceptará ningún proyecto de federación en la zona. El señor Osman subrayó además que «la alianza de Marruecos con Mauritania es -irreversible».

Declaraciones de ex polisarios

El Ministerio del Interior acaba de presentar a la prensa a cinco ex guerrilleros del Polisario que, entre el 2 y el 5 de noviembre, huyeron a Marruecos. Se trata de Abderraham Uld Suidi, que en mayo último participó del secuestro de siete técnicos franceses en Zuerat (Matiritania), M'Muadi Uld Selma, ex comandante de sección en el Polisario; Ali Salam Uld Erguibi, ex comisario político; Suijata Uld Selma Uld Buich, y Laa Juidi Bkahim. Todos ellos pertenecen a la tribu Izarguien, asentada en la región de El Aaiún. Manifestaron, entre otras, cosas, las siguientes:« En los campos de refugiados de Tinduf (Argelia) -explicaron- hay un tercio de población saharaui. En las unidades de combate, sólo un quinto. La tribu con presencia más numerosa en el Frente Polisario es la de Erguibat, procedente en su mayoría de Argelia y Mauritania. Abandonamos el FP porque nos sentíamos en un medio hostil, lejos, además, de nuestras familias. Somos una minoría en el FP y estamos muy vigilados por los argelinos.»

«Argelia -añadieron- nos prometió la independencia del Sahara y por ahora ha cumplido su palabra. Da ayuda humana y buenos medios para combatir. Los saharauis recibieron, al principio, apoyo de Libia, cuando funcionaba el Frente de Liberación del Sahara (FLS). Después, los argelinos se interesaron en nosotros, en nuestras células, y cambiaron el nombre del FLS por el de Polisario. En este momento, el Polisario recibe ayuda española. En Tinduf vimos veinte Land Rover Santana, y los argelinos nos dijeron que los habían mandado los «comunistas» españoles. En el frente luchan algunos vascos. Ahora hay un español en la cárcel porque intentó fugarse.»

El secuestro

Abderraham Uld Suidi relató el secuestro de los siete franceses en estos términos:«Salimos de Tinduf en dirección a Rghiua. Eramos sesenta guerrilleros. Allí nos encontramos con otros sesenta. Luego pasamos por Gelta Zenmur, Bir Mugriny y Miyeck. Cenamos en Geld-Adruss. Desde allí fuimos directamente a Zuerat. En total, dos días de marcha, y unos cuatrocientos kilómetros. Llegamos a Zuerat a la una de la mañana. No sabíamos aún que teníamos que capturar extranjeros. Hicimos trincheras para cubrir la salida del pueblo. Unos ochenta guerrilleros entraron en Zuerat. Los demás nos distribuimos en dos grupos para cubrir la retirada. Yo tenía a mi cargo cuatro cañones. Finalmente, un comisarío nos explicó la operación y nos habló de los rehenes que teníamos que conseguir para que Francia reconociera al Polisario. El ataque empezó a las cinco. Los mauritanos hicieron un movimiento envolvente. La lucha fue muy violenta. A las nueve apareció el grupo que había entrado en Zuerat. Traía a cinco hombres y una mujer, todos franceses. También nueve jeeps, dos camiones y un Peugeot. La mujer tenía una herida en la cara y lloraba. Nos encaminamos hacia Berg Mugrn y allí tuvimos que combatir con más tropas mauritanas. Después nos dividimos en tres grupos: uno avanzó hacia Malí, otro hacia el Noroeste y otro hacia Vasi-Robinet, al sur de Tinduf, con los prisioneros. Allí nos reunimos todos el 5 de mayo.»