La integración al Mercado Común, centro de la campaña electoral
El próximo año 1,978 debería ser decisivo para el ingreso de Grecia al Mercado Común. Para evitar tensiones electorales y poder centrar todos los esfuerzos del Gobierno en dirección a Europa y a una solución en el conflicto chipriota, el primer ministro griego, Constanliño Caramanlis, decidió adelantar en un año las elecciones Legislativas. La decisión de vincular Grecia al Mercado Común al que está asociada desde 1962- es tema de campaña electoral. Sobre todo por parte, de los socilistas panhelénicos del Pasok, que se declaran contrarios a entrar en la «eurocracia».Si, como predicen los últimos sondéos, el Pasok que preside Andreas Papandreu, se convierte en el segundo partido polítilo griego, la polémica entre pro Mercado Común y anti Mercado Común puede radicalizarse.
El Pasok cuenta con el apoyo del Partido Comunista griego (KKE) en su postura contra la entrada al Mercado Común.
Después de las elecciones del domingo 20 de noviembre, Caramanlis puede encontrarse con una oposición importante a su propósito de incorporar Grecia al «club» europeo. Diferencias que, a lo mejor, no dejarían de ser explotadas por algunos Estados miembros de las Comunidades Europeas, que después del «sí» político a la candidatura de Grecia, Portugal y España, temen ahora sus repercusiones económicas.
Caramanlis, hombre de la Nueva Democracia griega, centró toda su politica exterior en una rápida adhesión al Mercado Común. En Bruselas dan largas al asunto, a riesgo de que le cueste la pérdida de miles de votos al primer ministro actual.
«Entrar en el Mercado Común será la ruina»
«El Mercado Común será la ruina para la agricultura y la industria griega», decía anoche Andreas Papandreu, ante 300.000 personas reunidas en la plaza de la Constitución, de Atenas.
Ironías de la política. Papandreu habló desde la tribuna situada en el moderno edificio del Ministerio de la Coordinación Económica donde trabajan todos los «cerebros» de la operación para el ingreso de Grecia al Mercado Común. Se trata del balcón habilitado por el Gobierno para dar la palabra a los principales líderes políticos en sus últimas reuniones electorales.«El líder del Pasok se declaraba partidario al Mercado Común en 1965. Hasta hace unos meses, totalmente contrario. Hoy propone un acuerdo especial que garantice los intercambios económicos. Papandreu cambia continuamente», declararon en el Ministerio de Coordinación Económica, al enviado especial de EL PAIS.
El 50 % de exportaciones griegas van a los nueve de la CEE, y el 143,8 % de las importaciones vitnen de la CEE. Cifras, según los técnicos, que por sí solas justifican la intención económica de Grecia de integrarse al Mercado Común. Amén de los repetidos argumentos de «consolidación» de la democracia.
«La CEE crece ante todo bajo la influencia de la OTAN », replica Akis Tsotratzopulos, miembro del Comité Central del Pasok.
Repite los argumentos de Papaildreu: la vocación mediterránea; balcánica y europea de Grecia. Los ejemplos de «colonización» de los países ricos del norte europeo sobre los del sur. El firme propósito de luchar para que «Grecia no se convierta en una provincia, donde las decisiones se toman en Bruselas».
Tsotratiopulos cree en una «Europa federal y socialista, donde se respeten las autonomías de cada país». Añade que una futura victoria de¡ socialismo en España e Italia contribuirá a los propósitos del Pasok.
El Partido Socialista Panhelénico propondrá, en el nuevo. Parlamento, posiblemente como primer partido de la oposición, « un debate político sobre la entrada de Grecia al Mercado Común». Que cada uno exponga sus razones, que se sometan a referéndum del pueblo griego y que, sólo a continuación, se decida el catpino, dicen en el Pasok.
Las promesas sociales de la izquierda
La polémica sobre las Comunidades Europeas se desarrolló en un ambiente económico particular.
Teniendo en cuenta la mala situación internacional, Grecia no sale tan mal parada de la crisis. Para un país con algo más de nueve millones de habitantes y un territorio de 130.000 kilómetros cu adrados, cuerita con una renta per capita de unos 2.500 dólares
La inflación en 1977 será ligeramente inferior al 12 %, según fuentes de la OCDE, loque le sitúa enla media de1a CEE.
El alto porcentaje de población agrícola 35 %,-y la buena actividad en la industria, limita los efectos del desempleo o, si se prefiere, los camufla en subempleo.
El salario mínimo es de quinientos drakmas ( 1.200 pesetas) y los precios de bienes de consumo, más bajos que en la mayoría de países europeos.
El Pasok promete a sus electores transformar la economía griega en autogestionaria. Ataca la existencia de grandes monopolios y acusa a los industriales de boicotear las inversiones.
Con clamores de «adelante Andreas, hacia una nueva Grecia», los partidarios del Pasok respondieron anoche en la plaza de la Constitución a las promesas electorales de Papandreu: semana laboral de cinco días y cuarenta horas, retiro después de 35 años de trabajo (sesenta ó 55 años de edad como máximo) y ajuste automático de los salarios al aumento del nivel de vida.
Socialistas y comunistas se declaran por la unidad sindical, aunque critican el «control de la derecha» sóbreel único sindicalo, Unión Centril de Obreros Griegos, que cuenta con 500.000 afiliados, en una población activa de más de tres millones.
La réplica de Nueva Democracia a los argumentos de la izquierda son la reabsorción de la importante deuda exterior que dejaron los coroneles. La reducción de la inflación del 33 al 12 %. La creación de nuevos puestos de trabajo, y la opción de ingreso al Mercado Común, en la que centran quizá, demasiadas ilusiones.
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