El PC francés, inquieto por las buenas relaciones París-Moscú
El Partido Comunista francés (PCF) se inquieta ante los honores que está prodigando el Kremlin a los dirigentes de la derecha gobernante en vísperas de las elecciones legislativas.El Último protagonista de las conversaciones franco-soviéticas «entre amigos» fue el ministro de la Defensa, Yvon Bourges, que terminó ayer una visita oficial de cinco días y fue recibido, durante hora y media, por el presidente del Presidium del Soviet Supremo, Leónidas Brejnev.
Ninguna información oficial ha dado cuenta de los resultados prácticos de este viaje: los interesados se limitaron a afirmar que «los soviéticos conceden mucha importancia a sus relaciones con Francia y que las conversaciones con Bourges se han desarrollado en un clima serio y constructivo».
El aspecto importante e «inquietante» para los comunistas galos reside en los honores espectaculares que los dirigentes de Moscú están reservando a los franceses en vísperas de los comicios legislativos de marzo de 1978 y, por añadidura, en un momento en que la Unión de la Izquierda vive una crisis que ha puesto en entredicho su eventual victoria.
Por otra parte, Bourges se entrevistó ampliamente con su colega soviético, el mariscal Ustinov, miembro del Buró Político del Partido Comunista soviético.
