Homenaje nacional a Pablo Picasso
A principios del pasado mes de mayo (los días 7 y 8, por más señas) se anunciaba oficialmente la convocatoria de un homenaje nacional y popular que en Málaga, su cuna, se iba a rendir a Pablo Picasso. El anuncio mismo constituyó ya un homenaje. Fueron colocados, con tal motivo, ramos de flores en la fachada de la casa que albergó el nacimiento del pintor; en el salón de actos de la Sociedad Económica de Amigos del País se desarrolló una conferencia-coloquio sobre el tema Picasso, vida y obra; en la plaza de la Merced, testigo de las primeras correrías picassianas, se instaló una gigantesca reproducción del Guernica, debida a un grupo de artistas plásticos; hubo un recital de flamenco a cargo de José Menese; se editó un cartel, obra de Alberti, alusivo a la conmemoración..., y quedaron pergeñadas las líneas maestras del proyecto general.Los propósitos de entonces están hoy a punto de hacer realidad la inexcusable exigencia de homenaje al español más insigne del siglo, merced a una serie de actos, culturales y populares, que tendrán lugar en Málaga del 21 al 30 del presente mes. Para garantizar un alcance auténticamente nacional se han creado comisiones pro homenaje en las diversas regiones y provincias. Por ahora, y en espera de la adhesilón e integración de las demás, dichas comisiones vienen actuando en Madrid, Barcelona, Bilbao, Las Palmas, Valladolid, Oviedo, Avila, Burgos, Salamanca, Palencia, Orense, Zaragoza, Valencia, Santander, Logroño, Palma de Mallorca, Albacete, Murcia y Sevilla. Junto a la comisión correspondiente, en Málaga se ha creado un Comité Ejecutivo, destinado a coordinar la compleja diversidad del homenaje.
Justifican los organizadores, el porqué de los actos comenmorativos en estos términos literales: «Pablo Picasso, el artista más universal del siglo, ha sido ignorado en su propio país, España, durante los cuarenta años de dictadura. Ni si quiera en su ciudad natal, Málaga se le rindió en vida un homenaje público, aunque algunos artistas e intelectuales realizaran actos culturales en su honor. Muerto en el exilio, en una extraordinaria plenitud artística y humana, no pudo ver el renacer deinocrático español. Se mantuvo siempre al lado de nuestro pueblo, en defensa de la libertad y la amnistía, testigo solidario de la lucha popular contra la opresión. Es hora, pues, de reivindicar la figura y la obra de este malagueño universal para nuestro pueblo, para todos los pueblos de España. Es un deber moral, cultural y político rendir a Picasso este homenaje. Picasso sigue vivo en su obra artística y en su testimonio.»
Popular estatal e independiente
Se quiere que el homenaje nacional atienda a todos los alcances que su propia definición comporta. Por lo que hace a su destino participativo, será, ante todo, una manifestación popular, específicamente orientada hacia aquellos sectores del pueblo y masas ciudadanas que por propia naturaleza ostentan su representación mayoritaria, y con firme apoyatura en aquellas agrupaciones que mejor la definen; asociaciones de vecinos, sindicatos obreros, partidos políticos democráticos, personalidades del arte y la cultura, entidades culturales independientes...La organización subraya con doble frazo esta condición de independencia a que se ha atenido la totalidad del programa y a la que habrán de ajustarse los actos en él comprendidos. Es propósito unánime excluir toda intención sectaria o partidista, así como la instancia injerencia o patrocinio de cualquier organismo oficial. La efectiva concurréncia de las entidades reciénmencionadas disipa dudas en lo tocante al primer punto, Y, por lo que al otroconcierne, la propia comisión organizadora se expresa en este sentido y con estas razones. «Cuando aún no ha culminado el proceso democrático a nivel de Diputaciones y Ayuntamientos, sería contradictorio un apoyo oficial por parte de los mismos que han bloqueado toda comunicación entre el artista y su pueblo».
El homenaje tendrá, por último, un estricto carácter estatal esto es, basado en la activa colaboración de las distintas comisiones a nivel de todo el Estado español. La parte central del homenaje tendrá lugar, obviamente, en la ciudad natal de Picasso. Para dar, no obstante, visible cumplimiento al alcance estatal de la conmemoración, se ha juzgado oportuno que cada una de las comisiones asuma iniciativas autónomas en los respectivos pueblos de España, y se desarrollen, a lo largo del presente mes, actividades culturales encaminadas a divulgar vida y obra del pintor del siglo. Algo así como el mes Picasso, preparación o anticipo de la gran concentración que del 21 al 30, ha de producirse en Málaga, resarcimiento y desagravio de tantos, tan explícitos y no lejanos desdenes oficiales.
Capítulo clave en las miras de la comisión organizadora y su comité ejecutivo ha sido el modo de financiar unos actos cuya complejidad y coste saltan a la vista. La decisión está tomada: la autofinanciación. Se está gestionando un crédito, cuya garantía radicará en el préstamo temporal de obras por parte de destacados artistas de diferentes nacionalidades y regiones
de España. Como fuente de ingresos se han previsto representaciones teatrales, proyecciones cinematográficas, festivales de música, venta de objetos relacionados con el homenaje y donaciones privadas. De haber ganancias se verían
destinadas a la finalidad única de mantener vivo el legado de Picasso en su ciudad de origen.
Un nutrido programa
No deja de ser nutrido el programa. El día 22 quedarán abiertas sus páginas con un gran recital de cante y baile flamenco. Al día siguiente, los principales cantantes de las distintas nacionalidades y regiones participarán en un festival de música popular. Habrá conferencias en torno al tema picassiano, del 24 al 29, a cargo de destacados especialistas, y todas ellas se verán seguidas de un coloquio indiscriminado. Los días 24, 26 y 28, se representarán las obras teatrales de que Pablo Picasso es autor. Durante toda la semana se proyectarán películas relacionadas con el pintor malagueño y permanecerá abierta una exposición con obras de artistas plásticos cedidas al efecto. Si el preámbulo va a consistir, el día 2 1, en una verbena popular, también será popular, el día 30, el colofón, precedido de un recital poético a cargo de Rafael Alberti, Blas de Otero, Gabriel Celaya...La comisión organizadora está integrada por una treintena de conocidas personalidades de la vida cultural malagueña (cuya nómina completa me es imposible transcribir por, solas razones de espacio) y forman el comité ejecutivo los siguientes miembros: Ramón Ramos Martín, presidente del Ateneo de Málaga; Andrés Martínez Lorca, profesor universitario; Salvador Moreno Peralta, arquitecto; Enrique Brinkinann Paradera, artista plástico y senador, y Juan Vázquez Cano, secretario del Ateneo malagueño. Han sido, asimismo, nombrados gerentes del homenaje Jose María Kaydeda, en Barcelona; Eduardo Arenillas, en Madrid, y Antonio Moreno Fleitas, en Málaga.
Tampoco me es posible dar cuenta y pormenor de los cientos de adhesiones que se han producido y siguen diarlamente produciéndose. Valgan de muestra, y por todos, los nombre que siguen: el alcalde de Roma, y prestigioso tratadista de arte, Giulio Carlo Argan; los pintores Joan Miró, Antoni Tapies y José Guinovart; los poetas Rafael Alberti, Blas de, Otero y Gabriel Celaya, los catedráticos Antonio Bonet Correa, José Luis Martín, Julio Valdeón y Marcelo Vigil, los escritores Miguel Delibes y Buero Vallejo, el músico Cristóbal Halffter, el escultor Pablo Serrano, el secretario general del Partit Socialista Unificat de Catalunya, Gregorio López Raimundo...
Un homenaje, en fin, estatal, popular e independiente, cuyo triste anacronismo va a ser, de algún modo, paliado por la masiva participación de no pocos compatriotas de Picasso, de ese personaje colosal.
Babelia
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.