El cine de las nacionalidades, marginado del certamen de La Coruña

Sin más pena ni gloria que en ediciones anteriores terminó el V Certamen de Cine de Humor Ciudad de La Coruña declarando mejor película que entró en concurso a la cinta alemana Bomber und Paganini. El mejor director fue el mexicano Luis Alcoriza por su película Las Fuerzas Vivas, mientras que el premio al mejor gag correspondió a la obra alemana ya citada. La mejor interpretación masculina fue para Tilo Prückner por su papel en Bomber und Paganini y la femenina correspondió a Candic Rialson en la cinta norteamericana Chatterbox.El jurado, presidido por el escritor gallego Carlos Martínez Barbeito, otorgó igualmente menciones especiales a las películas Chatterbox y Les Males, y a los actores Alan Arking y Barbara Valentín. No merecieron premio ni mención alguna las dos únicas obras españolas que se presentaron al certamen La viuda andaluza y Susana quiere perder eso.

La película de Luis Alcoriza Las Fuerzas Vivas acaparó, por lo demás, los restantes premios del certamen al llevarse también el premio del Círculo de Escritores Cinematográficos al mejor guión y el premio de la Asociación Cinematográfica de La Coruña a la cinta que más resaltara la alegría de vivir. Apreciables valores en cuanto a este último tema fueron mencionados también por el jurado sobre la obra del brasileño Hugo Carvana Vai trabalhar vagabundo.

Como nota destacada del final del certamen aparece el comunicado elaborado por los participantes en las conversaciones sobre cine de las nacionalidades, los cuales plantean la necesidad de que sean creadas infraestructuras industriales que posibiliten la existencia real de producción y difusión cinematográficas ligadas a las instituciones culturales de las organizaciones nacionales y populares que deberían pasar por el control democrático de las televisiones y escuelas de formación cinematográfica nacionales.

Se reclama el trabajo estable para estas cinematografías y el establecimiento de mecanismos de financiación, protección fiscal y formalización jurídica de las actividades cinematográficas y culturales de las nacionalidades. Entienden los cineastas reunidos en La Coruña que este proceso sólo podrá culminar con la consecución de estatutos de autonomía y el derecho de autodeterminación para cada nacionalidad y región. Como todos los años se planteó la protesta de que los organizadores del certamen coruñés marginan al cine de las nacionalidades tanto a nivel de proyecciones como en cuanto a la presencia en los órganos del certamen.