Difícil posición negociadora de España ante la CEE en el tema pesquero

« Plantearé el tema de la pesca nada más llegar a Bruselas», aseguró ayer el ministro de Asuntos Exteriores, Marcelino Oreja, en una reunión informal mantenida con los informadores poco antes de dirigirse a la capital comunitaria, donde presentará la demanda oficial de adhesión de España a las Comunidades Europeas. Marcelino Oreja señaló también que el contencioso pesquero era extraordinariamente complejo, aunque vital para muchas familias del norte y el oeste de la Península. En sus manifestaciones, el canciller español dejó traslucir el criterio de que existen en España excesivos barcos para las disponibilidades pesqueras con que cuenta el país. Esto pudiera derivarse de la generosidad con que se han concedido créditos para la construcción de buques pesqueros en pasados años.

En general, el criterio del responsable de la diplomacia española es el de que no existen excesivas posibilidades de negociación con la CEE en temas pesqueros, ya que España tiene escasas contrapartidas que ofertar. Ni siquiera en el aspecto de las empresas mixtas -interesantes. para otros países- puede insistirse frente a los comunitarios, ya que éstos tienen escasos problemas de financiación.

Respecto a las posibles acciones españolas sobre flotas que faenan en las proximidades del archipiélago canario, el ministro señaló que realizan sus capturas en aguas internacionales y no españolas, aunque tengan sus bases operativas en las islas.Numerosos buques amarrados en Ondárroa

Con el regreso de los veintiocho buques expulsados del Gran Sol, dentro de las doscientas millas jurisdiccionales de Irlanda, son ya 38 los barcos pesqueros con base en la localidad vizcaína de Ondárroa que se encuentran en paro forzoso, según fuentes de los armadores.

Al parecer, son muchos los barcos con base en ese puerto que en los últimos días han abandonado sus tareas en el Golfo de Vizcaya por temor a ser apresados por las lanchas francesas que vienen incrementando su vigilancia y rigor en la aplicación del régimen pesquero comunitario.

Los armadores del norte de la Península se encuentran en un estado de profundo pesimismo por el escaso número de licencias otorgadas por la CEE, que no cubren siquiera mínimamente las necesidades de la flota. Por otra parte, las mismas fuentes de los armadores manifiestan que esperaban una postura más definida en el Gobierno tras su última reunión del Consejo de Ministros. Los armadores consideran que el Gabinete no ha definido adecuadamente su postura ante las constantes presiones por parte de los nueve y su rigidez en aplicar el régimen pesquero aplicable a los países ajenos a la Comunidad Económica Europea.