Devaluación y reforma fiscal: un plan de dos años para evaluar la economía

El anuncio de que el Gobierno enviará en breve un proyecto de Constitución a las Cortes y de que convocará elecciones municipales este mismo año y la adopción de una serie de medidas que, basadas en la devaluación de la moneda y la reforma fiscal, aseguren el saneamiento de la situación económica en un plazo de dos años, constituyen los aspectos de mayor relieve, en lo político y lo económico, respectivamente, contenidos en la declaración programática del Gobierno, leída anoche a los informadores en los estudios de RTVE por el ministro adjunto para las Relaciones con las Cortes y portavoz gubernamental, Ignacio Camuñas.

La declaración política del Gobierno comienza aludiendo a las elecciones del 15 de j u n lo, e n las que se ha expresado «clara y libremente la voluntad popular»,En un terreno más concreto, el señor Camuñas se refirió a los temas políticos constitucionales y anunció el propósito del Gobierno de enviar a las Cortes, en el plazo más breve posible, un proyecto de Constitución.

En el proyecto citado se prestará especial atención a la defensa de los derechos, a la responsabilidad del Gobierno ante las Cortes y a la institucionalización de las regiones, incluidos los regímenes de autonomía. Mientras tanto, se realizará una política descentralizadora.

Por otra parte, el Gobierno anunció la convocatoria de elecciones municipales dentro de este año, la próxima solicitud de ad hesión a la CEE y la Integración en la, política occidental y mediterránea, con un debate nacional sobre la Integración en la OTAN.

Tras hacer hincapié en que ha llegado la hora de la economía y destacar la gravedad de la actual situación, el Gobierno se plantea el cuadro básico del programa económico que va a adoptar. Este programa es calificado en la declaración de enérgico y capaz de sanear la economía en dos años.

La primera medida concreta del plan es el restablecimiento de un tipo de cambio realista de la peseta. El portavoz del Gobierno no precisó en la rueda de prensa la materialización de esta medida y remitió a la reunión que hoy mantendrá el gobernador del Banco de España con la prensa.Según ha podido saber EL PAIS, el propósito del Gobierno es dejar la peseta en flotación a la baja, para intervenir sólo si alcanza unos niveles considerados mínimos. La cota de las 85 pesetas por dólar, equivalente a una depreciación del orden del 20 %, se considera en estos momentos como mínima. Ayer el mercado de cambios permaneció cerrado con objeto de evitar especulaciones. Hoy vuelve a reanudarse el mercado, que fijará un cambio a través del cual se conocerá la medida de la presente depreciación.

El Gobierno, por otra parte, se compromete a remitirá las Cortes antes del 30 de septiembre un proyecto de ley de reforma del impuesto sobre la renta y otro sobre el impuesto sobre el patrimonio. Antes del 30 de noviembre se remitirá otro proyecto de reforma de la imposición indirecta.

En el terreno fiscal se pretende que los aumentos de recaudación necesarios para gastos dedicados al seguro de desempleo o a la creación de puestos de trabajo se obtendrán a través de impuestos directos. Para ello, entre otras medidas, se establecerá con carácter Inmediato una imposición extraordinaría sobre el patrimonio y se permitirá la investigación de cuentas corrientes bancarias con Fines de eliminación de fraude Fiscal.

En materia de desempleo, el Gobierno se compromete a perfeccionar las prestaciones del seguro de desempleo e impulsar una programa de gasto público con carácter local y las zonas más afectadas por el paro: se concederán incentivos fiscales a las empresas que aumenten plantillas y el Presupuesto asumirá un papel más activo en la financiación de la Seguridad Social.

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