Las multinacionales, preocupadas por el fenómeno eurocomunista

El futuro político de Europa del Sur y el fenómeno del «eurocomunismo» preocupan a las grandes compañías multinacionales. Durante esta semana, representantes de una veintena de estas empresas han discutido discretamente, en un hotel de Nueva York, sobre cómo puede afectar a sus inversiones en España, Portugal, Francia e Italia el desarrollo del eurocomunismo y los cambios políticos que se anuncian en estos países.

Una empresa de asesoramiento a las grandes compañías, la Probe International Inc, organizó un seminario de tres días para informar de estos temas a los ejecutivos de las multinacionales. Italia y España fueron ayer los países a estudiar y, aunque no se llegó a conclusiones, la impresión general es que las multinacionales creen que cualquier cambio en estos países no supondrá un beneficio para ellas, sino más bien una serie de problemas.Sobre la situación en España habló un funcionario del Departamento de Estado norteamericano que estuvo destinado hace algunos años en nuestro país. Sin que faltaran citas a San Ignacio de Loyola y a Hernán Cortés en su intervención, el funcionario se refirió a las próximas elecciones barajando los datos de las últimas encuestas. Habló del individualismo español y de las dificultades que, en su opinión, podrían presentarse para formar un Gobierno de coalición. Respecto al Partido Comunista Español, el orador dijo que las divergencias entre los «eurocomunistas» y los partidarios de Moscú eran muy grandes y vaticinó una escisión del PCE en el futuro. La libertad sindical significará un aumento de las peticiones obreras, que costará más dinero a las empresas. Al parecer, la intervención sobre España debía haber corrido a cargo de algún diplomático español, pero no fue posible y se optó porque hablara del tema el citado funcionario norteamericano.

En cuanto a Italia, el invitado fue Carlo Libertini, del Partido Comunista Italiano, que fue hace años vicepresidente del Parlamento de Palermo. Libertini dijo que su partido confiaba estar presente en el Gobierno el año que viene, y defendió las elecciones al Parlamento Europeo que, aseguró, beneficiarán al PCI