Intento de definición del "fenómeno Chirac"

Un discurso pronunciado en Saint Nazaire, a comienzos de semana, por el presidente del Rassemblement gaullista, Jacques Chirac, ha originado lespuestas para todos los gustos cuando en una encuesta se ha preguntado a varias figuras significativas del espectro ideológico francés: «¿Es fascista Jacques Chirac?»

Este nuevo intento de definición del fenóméno Chirac se produce en el momento en que el rival del presidente Valery Giscard d'Estaing, parece encontrar dificultades para ampliar la audiencia de su partido gaullista.

Discurso

El lunes, el señor Chirac pronunció un discurso, en la villa de Saint Nazaire, que inquietó en no pocos medios políticos. «No debemos temer ser tratados de fascistas», dijo, después de haber denunciado el «abandono» y la «debilidad» del Gobierno actual. Lo que provocará el resurgimiento del fascismo es la indulgencia con los abusos, el socialismo demagógico, la agitación subversiva, la irresolución de un Gobierno que no confia en su legitimidad», concluyó. Según a encuesta referida, el presidente de la Asamblea Nacional, Edgar Faure, que apoyó la creación del Rassemblement estimó que «Chirac es el antiprototipo del fascismo». Dos miembros del Gobierno actual, Olivier Stirn y Jacques Barrot vieron el fenómeno de distinta forma: el primero se manifestó «preocupado por el hecho de que Chirac sienta la necesidad de hablar de rascismo y porque, desde hace algunas semanas, se observa que la extrema derecha se reconoce en él».

Igual que Poniatowski

El conocido jurista y observador político Maurice Duverger dice: «Chirac no es ni más ni menos fascista que Poniatowski». Para el líder comunista, miembro del comité central, Pierre Junquin, «Chirac no es ni más ni menos fascista que Giscard.» El ex ministro del general Charles de Gaulle, Leo Hamon, dijo que el señor Chirac no persigue deliberadamente la instauración del fascismo, pero temo el clima que está creando. En opinión del lider del Ceres,a la izquierda del Partido Socialista, Jean Pierre Chevenement: «Hoy, no es posible calificar a Chirac de fascista, pero entre quienes le rodean hay gentes que merecen dicho calificativo.»

Para otro gaullista puro, Alexandre Sanguinetti, ver un fascista en el señor Chirac «es una acusación propia de gentes con ideas cortas». Y finalmente, el alcalde de Marsella y líder del PS, Gaston Defferre, dice que «Chirac habló de fascismo (en Saint Nazaire), y no hizo más que emplear la palabra que le va.»