Prohibida Pantleon y las visitadoras

La película de José María Gutiérrez y Mario Vargas Llosa, Pantaleón y las visitadoras, basada en la novela de igual título del escritor peruano, acaba de ser prohibida íntegramente por la censura, dependientes de la Dirección General de Cinematografia. «Se han basado -comentó uno de sus directores, José María Gutiérrez, a EL PAIS- en la norma cinco de la orden de 19 de febrero de 1975 referente a las normas de clasificación, más concretamente en los apartados a y e.»

La mencionada norma dice: «5. La obra cinematográfica podrá presentar hechos o propugnar tesis sobre cualquier clase de temas o problemas dentro del respeto debido a:

a) La verdad, no admitiéndose el falseamiento tendencioso de hechos, personajes o ambientes históricos o actuales, debiendo en todo caso quedar suficientemente claro para el espectador normal la distinción entre la conducta de los personajes y lo que los mismos representan.

El apartado e) señala: Las exigencias de la defensa nacional, de la seguridad del Estado, del orden público interior y de la paz exterior.»

Pantaleón y las visitadoras, proyectada sin complicaciones en la última Semana Internacional de Cine de Color de Barcelona es una fiel, incluso, excesivamente respetuosa, adaptación de la novela de Vargas Llosa que fue, sin duda, uno de los, libros más vendidos en el año de su publicación en España. Desde un punto de vista cinematográfico los reproches que se le han hecho han sido precisamente los de una excesiva supeditación al discurso literario. Sorprende por tanto la decisión administrativa de prohibirla alegando razones de «seguridad del Estado, del orden público interiory de la paz exterior».

En el caso de la película se da el caso de que si bien la acción transcurre en la selva peruana existen sospechas de que la prohibición podría, estar vinculada a la opinión del Gobierno peruano- el país que produjo la película, la República Domini.cana, se fe afectado por la decisión del Ministerio de Información y Turismo. Es decir que si su exhibición puede poner en peligro «la paz exterior» española -suponemos que por un hipotético ataque del ejército peruano- su prohibición nos deja desamparados ante la posibilidad de un ataque de las fuerzas armadas dominicanas.