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En torno a la pena de muerte

Homenaje universitario madrileño a Ramón Carande

El palentino Ramón Carande, de 89 años de edad, afincado en Sevilla y de cuya Universidad fue el último rector en la monarquía de Alfonso XIII, será investido doctor honoris causa por la Universidad de Madrid, en un acto que tendrá efecto en la mañana de hoy. Posteriormente el profesor Carande presidirá una mesa redonda sobre la pena de muerte que se celebrará en el Ateneo de Madrid.El autor de Carlos V y sus banqueros, y Sevilla, fortaleza y mercado, es doctor honoris causa por las universidades de Lille (1960) y Colonia (1969). La distinción actual que le confiere la Universidad madrileña presenta su pequeña anécdota cuando en febrero del pasado año le fue comunicado de forma oficiosa al profesor Carande el deseo del estamento universitario de Madrid de concederle el doctorado honoris causa y que no pudo realizarse en aquella ocasión por la oposición terminante del ministro del departamento, Cruz Martínez Esteruelas.

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Catedrático de Economia Política y Hacienda Pública, accedió al rectorado de la Universidad Hispalense, de cuyo cargo dimitió al establecerse la República en 1931, para pasar a ejercer funciones de consejero de Estado del Régimen republicano. Posteriormente sería detenido en el Madrid de la guerra civil. Una vez finalizada ésta, fue expedientado como catedrático por el Régimen franquista y sometido a depuración política. Debido a tales avatares, fue separado de su cátedra, lo que le posibilitó la tarea investigadora, cuyos frutos están representados en las obras citadas, la segunda de las cuales pormeno riza el costo total que tuvo que sufragar el país para que Carlos V llegara a dominar el mundo. Hombre de gran humanismo, sostuvo relaciones con los grandes pensadores de la época, muy especialmente con Ortega, Galdós y Unamuno. Jubilado oficialmente en 1957, su última lección impartida resultó un homenaje a todos sus maestros.

El profesor Carande se ha venido negando sistemáticamente desde 1939 a conceder entrevistas y a manifestarse públicamente. En la presente ocasión EL PAIS estableció contacto con el profesor, el cual reafirmóse en su postura, no sin expresar el profundo afecto que sentía por nuestra publicación.

«Usted ponga cualquier cosa que yo no lo voy a desmentir -añadió jocosamente Carande-, pero debe de comprender que esta postura la he observado toda mi vida y ya al final no voy a modificarla. Estos actos y estos hombres no me preocupan mucho. Los acepto porque pienso que la sociedad tiene necesiaad de ellos. ¿Por qué?, pues tal vez por una necesidad de reafirmarse y de divertirse. »

Según ha manifestado a EL PAIS su hijo y alumno, Ramón Carande, el profesor pronunciará un discurso en su investidura de unos veinte minutos de duración y en cuyo transcurso rendirá homenaje a las nuevas generaciones de españoles,en las cuales cree profundamente. Añadió su hijo que el profesor es un hombre que sigue muy de cerca la actualidad del país, siendo su máxima preferida la de que «por caminos fáciles no se consiguen metas». Se considera un hombre extraordinariamente afortunadoy su único pesarsecentra en la escasez de rigor y seriedad que se observa, en cierto sentido, en la universidad española.

Con respecto al acto que presidirá a las ocho de la tarde en el Ateneo madrileño, hay que subrayar que el profesor Carande es presidente de la Asociación de la Lucha contra la Pena de Muerte, cuyo secretariado ostenta la sevillana María Asunción Milá, verdadera impulsora de la idea, gestada y desarrollada en Sevilla.

Los ponentes de la mesa redonda serán el obispo auxiliar de Madrid, Alberto Hiniesta, Daniel Sueiro, Miret Magdalena, Carlos García Valdés, Enrique Gimbernat, José Luis López Aranguren, Francisco Tomás y Valiente y Julio Caro Baroja.

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