Los comunistas ceden posiciones en el Alentejo
El primer ministro portugués, Mario Soares, llegó ayer por la tarde a Faro, procedente de Cabo Verde, tras finalizar su visita al Brasil, donde obtuvo un préstamo de cincuenta millones de dólares. Casi al mismo tiempo que su avión aterrizaba en Faro -donde tuvo que pernoctar a causa de la espesa niebla que cubría Lisboa- los diputados de la Asamblea de Ia República comenzaron a discutir el «plan económico y el presupuesto general del Estado para 1977».Los diputados del Partido Sócialdemócrata y del Centro Democrático Social han manifestado ya su oposición a ciertos aspectos de la política económica del Gobierno, por lo que se esperan considerables modificaciones.
Entretanto, continúa en el Alentejo la «segunda reforma agraria», preconizada por el ministro Antonio Barreto. Este declaró ayer que ya no había «p quetes de vigilancia» en las unidades colectivas de producción. A ello ha contribuido sin lugar a dudas la presencia de numerosa fuerzas de la Guardia Nacional Republicana en las poblaciones y la actitud de los comunistas, en franca retirada.
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