Carrillo como teórico

Leyendo el editorial titulado «Carrillo, en Madrid», tengo que confesarle que he quedado un poco decepcionada, porque siempre he considerado queel nivel de objetividad que mantenían en ese diario ha sido muy elevado y creo que por el contrarío. en este caso no ha sido así.Desde hace algún tiempo, se ha venido desarrollando una campaña contra el secretario general del PCE. Y he aquí mi sorpresa al leer su editorial; estando con usted de acuerdo en el análisis que allí se hace acerca de la falta de argumentos legales para mantener en la ilegalidad a Santiago Carrillo, introduce en algunos apartados del editorial, -y esto es lo que me parece más criticable- una serie de juicios de valor sobre sus cualidades humanas, políticas e intelectuales, en los que me sorprende -porque no es lo habitual en su periódico- su falta de objetividad y el cierto menosprecio que hacía la persona de Santiago Carrillo parece encierran. Es como si el diario que usted dirige, sin entrar de lleno en la campaña que antes mencionaba, coqueteara un poquito -y lo que no entiendo es muy bien porqué- con ella.

Desde luego hay que reconocer, que muy lejos está Carrillo de hazanas épicas como las de Eneas fundando Roma, el Cid reconquistando el Reino de Valencia o San Jorge matando al dragón, pero reconozca el señor director, que al menos un poquito de hazaña épica si que tiene; haber vivido obligatoríamente exiliado durante cerca de cuarenta años y encima no cejar durante todo ese tiempo de trabajar por eso que hace tiempo se dio en llamar libertades democráticas y que hoy tantos se esfuerzan en aprender como se escribe. Pero no sólo eso, porque lo del exilio y otras menudencias, además del señor Carrillo lo han tenido que soport ar como han podido muchos hombres y muchas mujeres...

Lo que más injusto, me ha parecido de su editorial, ha sido ese menosprecio con el que se castiga la capacidad teórico-pblítica de don Santiago.

El Pactó para la líbertad y la reconliación nacional, que fueron formuladas por el PCE hace ya muchos años, se han mostrado como propuestas válidas para el desarrollo de la conquista de las libertades democráticas.

¿Y dónde estaba Santiago Carrillo cuando el PCE hacía estas formulaciones? ¿Acaso no tuvo en ello arte ni parte? Pues siento tener que confesarle que tuvo su papelito en todo aquello, por no decir un gran papel, no sea que luego me tilde de cultivadora de la personalidad.

En cuanto a su labor teórica sobre lo del eurocomunismo, el socialismo en democracia y todo eso... lo dejo para otro día. En eso parece ser que ha puesto él sus granitos de arena, porque no todo es cosa de ese amigo que tiene, que se llama Berlinguer.

Desde luego cuarenta años de dictadura no son los más idóneos para forjar dirigentes políticos para la democracia, y, por eso, las con tribuciones teóricas de los dirigentes políticos de casi todas las tendencias son, todavía hoy, desgraciadamente bastante pobres. Pero hay que reconocer que Santiago Carrillo es uno de los hombres de la Oposición democrática, que más han contribuido, con formulaciones políticas, a la conquista -hoy todavía no consumada-. de la De mocracia en España.

Algunos textos básicos de Santiago Carríllo: «¿Después de, Franco. qué?» «Nuevos enfoques a proble.mas de hoy». «Mañaría, España». «Informe al VIII Congreso de¡ PCE», «In forme a la reunión del Comité Central del PCE (Roma, 1976)».