Prego Pérez,
más conocido por Manolo, el Rubio de Bobadilla, parece ser de momento, el último guerrillero -quizá con ribetes de bandolero- capturado por la Guardia Civil. Manolo el Rubio estaba oculto desde 1949 en un cortijo de la serranía malagueña, propiedad de una mujer cuyo marido fue fusilado por los nacionalistas en 1936. Pablo Pérez ha sido puesto a disposición del juzgado de Marbella.
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