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La zona centro puede quedar cerrada a la circulación

Acometer una posible reducción de la contaminación en la zona centro de Madrid—o, por lo menos, en las más contaminadas— por medio de unas medidas de tipo circulatorio es lo que se propone llevar a cabo el Ayuntamiento dé Madrid, según se puso en claro durante, la rueda de prensa celebrada ayer por la mañana en torno al alcalde de Madrid, Juan de Arespacochaga. Otros temas tratados fueron la postura de Renfe en cuanto al Plan Atocha y las normas dictadas por la Delegación de Abastos y Mercados en relación con el control de precios de cara a los próximos días navideños.

La reducción de la contaminación en Madrid, puede lograrse tomando medidas de tipo circulatorio. Decará a una situación de emergencia, el alcalde de Madrid aseguró que llevan un mes estudiando las posibles normas. Las dos alternativas que se les presentaron fueron el cierre de una zona o el cierre puntual del eje Norte-Sur. En cuanto a la primera medida, se consideró que se podrían ocasionar molestias a los vecinos que la solución a que, en caso de emergencia recurriría el Ayuntamiento sería el cierre puntual de la zona Cibeles-Neptuno-Atocha.

Referente a este mismo tema, el delegado de Saneamiento del Ayuntamiento, aseguró que, dentro de tres meses, quedará abierto el segundo Centro de Control de Vehículos; situado en la carretera de Andalucía, en Villaverde. En este momento la patrulla verde cuenta con cuatro bancos de control; igualmente, tras el referéndum, el Ayuntamiento, iniciará una campaña de mentalización, de cara a concienciar a los madrileños del grave problema de la contaminación. Otra medida sería la limitación de la entrada a Madrid de vehículos de mercancías a los que se les desviaría por el tercer cinturón.

En cuanto a Renfe, el señor De Arespacochaga informó que el miércoles se había mantenido una reunión entre Gerencia Municipal de Urbanismo y Renfe, en la que estuvieron todos de acuerdo, y respecto al Plan de Atocha.

Finalmente, Pablo González Liberal informó de que la Delegación de Abastos y Mercados del Ayuntamiento de Madrid ha dispuesto la confección y de un cartel que recuerde las obligaciones y derechos esenciales del vendedor y del comprador que intervienen en el comercio minorista de alimentación. El texto de estos carteles, cuya exhibición será obligatoria; es el siguiente: «Todos los productos que se expongan estarán a la venta. Los artículos deberán manifestar su precio de venta con claridad y precisión. Los productos que se expendan deberán ser entregados por los comerciantes a los compradores convenientemente envueltos o envasados, excepto verduras, hortalizas y frutas de gran volumen. No podrá usarse como envoltura papel de periódico ni cualquier otro tipo de papel usado. Los artículos se entregarán al comprador por el precio anunciado y el peso integro solicitado, sin incluir en éste el peso del papel de envolver, que siempre será gratuito para el comprador y, finalmente, el público no podrá tocar los productos no protegidos con algún tipo de envoltura.»

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