Piñar, Fernández de la Vega y Escudero, enmendantes a la totalidad

Ayer se reunió la ponencia encargada de informar el proyecto de ley de reforma política. Presidida por el titular de la comisión de Leyes Fundamentales y Presidencia del Gobierno, Gregorio López Bravo, los miembros de la ponencia -Belén Landaburu, Lorenzo Olarte, Miguel Primo de Rivera, Fernando Suárez y Noel Zapico- permanecieron reunidos durante unas tres horas, al término de las cuales dieron cuenta de que son tres las enmiendas que piden la devolución al Gobierno del proyecto de ley de reforma: las suscritas por Blas Piñar, Manuel María Escudero y José María Fernández de la Vega.Según informaciones obtenidas por EL PAIS, sólo las enmiendas a la totalidad de los señores Piñar y Fernández de la Vega se oponen a la voluntad reformadora del Gobierno Suárez, mientras que la enmienda del señor Escudero Rueda considera escasos los propósitos reformistas del actual Gabinete, y sólo en función de esa escasez, se opone al proyecto de ley.

Como ya se informó en estas páginas, del total de 83 escritos presentados, sólo diecinueve otorgan a sus primeros firmantes el derecho a defenderlos en el Pleno.

Por otra parte, el informe de la ponencia deberá estar concluido a las doce de la noche del próximo día 12 de noviembre. A partir de esa fecha se iniciará el plazo de solicitud de nuevas intervenciones ante el Pleno de las Cortes, para aquellos procuradores que, no habiendo presentado observaciones o enmiendas al texto del proyecto, discrepen de las modificaciones introducidas por el informe de la ponencia.

Así pues, y a tenor de la explicación que el presidente de las Cortes, Torcuato Fernández-Miranda, facilitó a la prensa sobre las nuevas normas del procedimiento de urgencia, sólo quienes, por mostrarse de acuerdo con el proyecto del Gobierno, no hubieran emitido escritos objetándole, tendrán derecho a solicitar su intervención, a la vista del informe de la ponencia.

En medios legislativos, se valora esta disposición como una prima otorgada por el señor Fernández-Miranda a quienes, en principio, con su silencio, se muestren partidarios del proyecto gubernamental.