La Autónoma, supervisada por los mismos que la construyeron
«Quizá fuera conveniente que el Ministerio de Educación y Ciencia explicara ciertas coincidencias en las investigaciones sobre el hundimiento de la Autónoma», ha manifestado a EL PAIS un grupo de alumnos de la citada Universidad.
Los alumnos hacen referencia a que el informe de la Junta de Construcciones del Ministerio ha sido enviado al rector por Francisco Arance, director general de Programación e Investigaciones, que era gerente de la Autónoma cuando ésta se contruyó, como ya informó este periódico, y señalan otra casualidad: el primero de los técnicos que figuran en el citado informe, Agustín Gabriel, arquitecto-jefe de la Sección de Gestión de Proyectos, estaba entonces como arquitecto en la unidad técnica de la Junta de Construcciones y trabajando en proyectos. Lo cierto es que hay otros informes técnicos como el del Instituto Torroja y otros periciales pedidos por el juez.Los estudiantes solicitan que se dé entrada en las investigaciones sobre el hundimiento de la Facultad de Letras y el estado del resto de los edificios a arquitectos y técnicos designados por ellos.
Al parecer, el mal estado de las edificaciones no se limita al campus de Cantoblanco. Un grupo de profesores no numerarios y alumnos de los cuatro primeros cursos de la Facultad de Medicina, situada detrás de la Ciudad Sanitaria La Paz, se reunió ayer por la mañana, alarmado por la aparición de grietas y desperfectos también en este edificio. Según manifestaron, a lo largo de esta semana se cruzaron bancos en algunos pasillos que conducían a seminarios para impedir el paso a los mismos. La zona más afectada, según los alumnos, es el Departamento de Bioquímica.
Por otra parte, profesores y alumnos de las facultades de Cantoblanco formaron ayer una comisión para entrevistarse con el ministro, de Educación y Ciencia y plantearle tres temas: la situación actual de los edificios de la Universidad y el comienzo del curso; la convocatoria de un claustro extraordinario para proceder a la elección democrática de rector y la preparación de un programa: de trabajo para adecuar la Universidad a sus funciones, con participación de profesores, estudiantes y personal no docente.
Los profesores y alumnos quieren tratar con el ministro la cuestión del claustro de la Universidad para elegir democráticamente un nuevo rector porque el actual se ha negado reiteradamente a las peticiones hechas en tal sentido.
La comisión ha quedado formada por los catedráticos Cañibano, Díez Picazo, González Bermúdez, París, Pérez Sánchez, Tamames, De la Villa e Yndurain; el profesor agregado señor Bercovitz; los profesores no numerarios Martínez Castro y Zapatero y los alumnos Alonso-Martínez y Fernández.
Por otra parte, según Cifra, el próximo lunes se estudiará por cursos la propuesta de no entrar a clase en el edificio «B» de la Facultad de Filosofía de la Complutense en las actuales condiciones de seguridad en que se encuentra el edificio. En una asamblea celebrada ayer los estudiantes discutieron problemas relacionados con las grietas del edificio, el almacenamiento de los libros y la actitud de las autoridades académicas.
Según los alumnos, el Ministerio de Educación solicitó a fines del curso pasado, un informe al Instituto Eduardo Torroja y éste dictaminó que la estructura del edificio estaba diseñada para soportar una resistencia de 450 kilos de peso por metro cuadrado y, dadas sus actuales actividades y el número de alumnos, estaba soportando unos 1.200 kilos por metro cuadrado.
Los estudiantes manifestaron que no pueden utilizar los 90.000 libros existentes en la primera planta porque se encuentran almacenados y sin clasificar.
El claustro de profesores de la Facultad ha abogado por el cierre del centro y la suspensión de las actividades académicas; los estudiantes se niegan a la puesta en práctica de esta medida mientras no haya un lugar concreto para impartir las clases, que no sea Alcalá de Henares ni San Blas.
Al término de la asamblea, un grupo de alumnos representó una parodia sobre el hundimiento de la Autónoma y lo que, según temen, puede suceder en Filosofía «B» de la Complutense.
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