"Lo que pretende Icona es antisocial"

Cazadores y propietarios de Montejo de la Sierra han enviado a EL PAÍS una carta en la que protestan por lo que consideran un abuso del Icona, al establecer en su pueblo y en otro de la zona un coto de caza controlada.

Con fecha 12 de agosto se sometieron a información dos propuestas a través del Boletín Oficial de la provincia, para la adscripción al régimen de caza controlada de la zona del valle de Lozoya y de la zona nordeste con una superficie total de 86.918 hectáreas y 42 pueblos incluidos. Esta propuesta salió a información sin la previa consulta a los propietarios de los terrenos. «Su aprobación va a suponer un grave perjuicio económico y social para las zonas afectadas.»

La reserva de caza Sonsaz abarca los pueblos del noroeste de la provincia, Montejo de la Sierra, La Hiruela y La Puebla, entre otros. El precio que el Icona ha pagado en los años que lleva en la reserva es de cincuenta céntimos por hectárea, con lo cual corresponden a Montejo 400 pesetas. Los cazadores se preguntan cómo se va a efectuar este reparto entre los propietarios de los terrenos y el Ayuntamiento.

En una reunión mantenida por los interesados con responsables del ICONA se planteó la posibilidad de que, caso de crearse la reserva, algunos propietarios cercarían sus fincas y pondrían carteles de prohibido el paso, a lo que un representante del Icona contestó que debería hacerlo antes de que se aprobara el régimen de caza controlada, ya que después no podría «cerrar nada».

¿Cómo es posible que nos nieguen unos derechos a los propietarios de los terrenos que a la vez somos cazadores? ¿Se pretende llevar a cabo un coto de caza para uso y disfrute de unos cuantos privilegiados?»

En la reserva Sonsaz han estado durante algunos días cazadores desconocidos, con permiso para matar algunos ejemplares de corzo. « ¿Cómo se dan permisos para matar estos ejemplares, cuando es una especie que escasea bastante en esta reserva?»

Varios pueblos han intentado hacer un coto local de caza, pero no obtuvieron autorización, por lo que, como en el caso de Montejo, hicieron los trámites necesarios ante la Jefatura Provincial. Representantes del Ayuntamiento y diversos cazadores fueron recibidos por un miembro del Icona, quien les informó que la denegación de permiso obedecía a la intención del Instituto para la Conservación de la Naturaleza de hacer en aquellos lugares un coto de caza controlada.

«Existe en Montejo un hayedo, propiedad del municipio, que fue declarado parque nacional. En la entrada se ha puesto una cadena y un cartel de «prohibido el paso de coches». Las llaves del candado las tienen los guardas del Icona y el Ayuntamiento, dueño de los terrenos, no puede disponer ni de un duplicado.»