Se declara "reservada y secreta" la documentación del Consejo de Ministros
El ciudadano español partidario del procedimiento de luz y taquígrafos en los trabajos del Gobierno tendrá que resignarse a ver desterrado dicho principio no se sabe por cuánto tiempo. Toda la documentación que se eleve al Consejo de Ministros se considera, desde ahora, un secreto. Ciertamente, el secreto tiene un final, que es la resolución del Consejo de Ministros sobre el tema correspondiente, pero, casualmente, han sido suprimidas las ruedas de prensa posteriores a las reuniones del Consejo de Ministros. Por tanto, cualquier tema relativo a la gobernación del Reino queda exclusivamente confiado a lo que la burocracia administrativa considere oportuno explicar.La noticia de que la documentación del Consejo de Ministros será reservada y secreta fue comunicada ayer a las direcciones de los medios informativos por medio de un oficio de la Dirección General de Régimen Jurídico de Prensa, concebido en los siguientes términos:
«Por la Presidencia del Gobierno se ha remitido comunicado a este Ministerio por la que se participa, de orden del excelentísimo señor presidente del Gobierno, haberse declarado como materia clasificada en su categoría de reservada y secreta la documentación que se eleve al pleno del Consejo de Ministros y hasta tanto haya recaído resolución de éste.
Lo que traslado a usted para su conocimiento y observancia, de acuerdo con lo previsto en el artículo 9. apartado segundo, de la ley 9/68, de 5 de abril, sobre secretos oficiales.»
El tercer párrafo del texto legal citado en la comunicación se limita a señalar que cuando una materia clasificada pueda llegar a conocimiento de los medios de información se notificará a éstos la clasificación de secreto o reservado.
Tercera vez en tres meses
Es la tercera vez en tres meses, y segunda desde la formación del Gobierno Suárez, que las entidades oficiales hacen uso de la posibilidad de declarar algunas materias como reservadas o secretas.
El pasado 13 de agosto se dispuso la prórroga de la reserva que, desde el 30 de enero de 1971, pesa sobre las informaciones y comentarios relativos a Guinea Ecuatorial, renovada cada seis meses.
Anteriormente, el 2 de junio del presente año, la Fiscalía del Tribunal Supremo comunicó al Ministerio de Información y Turismo la declaración como materia reservada para las actuaciones judiciales relacionadas con supuestos malos tratos a Personas detenidas por parte de las fuerzas de orden público. En esta ocasión, la iniciativa para la aplicación de la ley de Secretos Oficiales partió de la Administración de justicia, tras la iniciación de diligencias por parte de la citada Fiscalía. La declaración se realizó después de que varios medios informativos de gran difusión procedieran a publicar informes y comentarios; sobre supuestas torturas, centradas principalmente en hechos acaecidos en Tolosa (Guipúzcoa) durante el mes de mayo.
Anteriormente -el 12 de abril del presente año-, el ministro de laGobernación había decretado la declaración como materia reservada por veinticuatro horas, de investigaciones relacionadas con la detención de militantes de ETA. Tras la misma se anunciaron los resultados de una operación policial contra dicha organización vasca.
El 20 de febrero del año en curso, el ministro de la Presidencia del Gobierno había dispuesto la declaración de materia reservada para todos los documentos, expedientes y material de trabajo de la comisión mixta Gobierno-Consejo Nacional, así como las propias deliberaciones de la misma. Esta declaración fue realizada cuando los medios informativos estaban publicando numerosas noticias y comentarios acerca de los proyectos de reforma emprendidos por dicha comisión mixta, entre los que no se excluía la propia reforma de la Constitución.
La situación guarda, aparentemente, cierta similitud con la actual, en que es el propio Gobierno el que se encuentra estudiando una ley de bases de reforma constitucional. Otra similitud: algunos medios informativos habían comenzado a desvelar a la opinión pública algunos aspectos de los tres borradores que se preparan en torno a la reforma constitucional.
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