Declarados improcedentes los despidos de los 140 trabajadores de Hutchinson

Tras casi ochenta días de huelga, la mayor parte de ellos encerrados en la iglesia de La Visatación de Nuestra Señora, de Moratalaz, los 140 trabajadores despedidos de la empresa Hutchinson, han recuperado sus puestos de trabajo, al declarar ayer la Magistratura de Trabajo número cinco de Madrid la improcedencia de los despidos.

La empresa se ve, tras la declaración jurídica favorable a los trabajadores, en la obligación de readmitir a la totalidad de los despedidos en las mismas condiciones que regían antes de producirse las sanciones y, al mismo tiempo, a abonar el importe de los salarios dejados de percibir desde el día en que los trabajadores fueron despedidos hasta la fecha de la readmisión. La cantidad que adeuda la empresa a sus empleados se calcula en casi seis millones de pesetas.Aunque el magistrado no ha considerado procedente condenar con la máxima sanción a los trabajadores, autoriza sin embargo a la empresa a sancionar a toda la plantilla con un mes de suspensión de empleo y sueldo, en la forma en que estime conveniente, por considerar que a los trabajadores no se le podía exigir otra conducta, dada la negativa de la empresa a aceptar el diálogo.

Durante el juicio celebrado el pasado día cinco, quedó probado que los trabajadores efectuaron un paro de dos horas de duración el día 1 de junio pasado, atendiendo al llamamiento de la UTT del sector Químico en apoyo del convenio colectivo que se negociaba durante estas fechas y bajo el convencimiento de que la empresa cumpliría lo pactado en un acuerdo previo del 10 de mayo. Según este acuerdo verbal, la parte empresarial se comprometió a no tomar represalias contra los trabajadores que pararan para presionar en las negociaciones del convenio, acuerdo que no cumplió puesto que al día siguiente suspendió a los trabajadores con una séptima parte del salario mensual.

Este incumplimiento por parte de la empresa a lo pactado anteriormente, puede haber sido el principal factor que ha determinado el fallo favorable a los trabajadores, ya que, legalmente, sólo se hacen acreedores de la máxima sanción aquelllos trabajadores que lleven a cabo una huelga «con ánimo de perturbar las relaciones laborales con la empresa y causar perjuicios de todo tipo a la misma». Y en esta ocasión, el magistrado ha considerado que los trabajadores «obraron influenciados por la situación creada a consecuencia del incumplimiento del acuerdo de la parte económica y con el ánimo lógicamente alterado, lo que les exime del pleno conocimiento que exige el texto legal. Por tanto, existen unas circunstancias que no justifican, pero atenúan notablemente, la conducta de los demandantes».

Desde el punto de vista jurídico, los abogados de los trabajadores de Hutchinson manifestaron a EL PAIS que la sentencia por la que se readmite a los trabajadores es jurisdicionalmente progresiva con respecto a otras sentencias, que sobre conflictos colectivos se habían dictado desde la vigencia del decreto de 22 de mayo de 1975, puesto que abre nuevas perspectivas de aplicación de la denominada tesis gradualista respecto a la participación de los trabajadores en la huelga. En este sentido, en la sentencia se afirma que «en este caso, en modo alguno se ha probado que alguno o varios de los demandantes hubiesen tenido una actuación destacada en la huelga, únicamente se ha probado que todos los trabajadores participaron en la huelga pero solidariamente y movidos por la actuación anterior de la empresa». Es decir, que la mera participación en la huelga no es forzosamente sancionable con el despido, tal y como considera el actual decreto regulador de la huelga.

Por su parte, los trabajadores ahora readmitidos celebraron ayer tarde una asamblea en la iglesia donde han permanecido encerrados, en la que pusieron de manifiesto que la readmisión se ha logrado gracias a la unidad mantenida por los trabajadores a lo largo del conflicto y por el apoyo decidido, tanto económico como moral,

Según fuentes laborales, los trabajadores de Hutchinson han recibido cerca de seis millones de pesetas que solidariamente les han entregado numerosos trabajadores.