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El Rey se entrevista con el comadante de las fuerzas USA en Europa

El comandante supremo de la Organización del Atlántico Norte (OTAN) y jefe de las Fuerzas norteamericanas en Europa, general Alexander J. Haig, se entrevistó a primeras horas de la tarde de ayer, durante casi media hora, con el Rey don Juan Carlos, en su residencia veraniega del palacio de Marivent, según informa nuestro corresponsal en Palma,

El general Haig llegó a la base aérea del aeropuerto de Son San Juan sobre la una y media en un avión perteneciente a la VI Flota norteamericana. En el mismo aeropuerto fue recibido por las primeras autoridades de la isla y el agente consular de los EEUU en Baleares, señor Bestard Bonet, con quien se trasladó directamente hasta el palacio de Marivent. A la llegada al palacio, el Rey recibió al jefe de la OTAN en el hall y juntos pasaron a uno de los salones del palacio.La entrevista del Rey con el jefe supremo de la OTAN duró veinticinco minutos y, poco antes de las tres de la tarde, el general Haig abandonó el palacio de Marivent para dirigirse hacia un hotel de la costa situado en la urbanización de Palma Nova, donde el general permanecerá hasta el próximo lunes.

«Estoy aquí de vacaciones -manifestó el general Haig al corresponsal de EL PAIS, poco después de su entrevista con don Juan Carlos- y ello me ha dado oportunidad para visitar al Jefe del Estado español y presentarle mis respetos. Para mí ha sido un honor el poder hablar sin ningún tipo de protocolo con el joven monarca y la entrevista que con él he sostenido ha sido en todo momento cordial. Se puede decir que el tema principal que hemos tratado en nuestra conversación ha sido la seguridad en el Mediterráneo occidental, tema que conoce en profundidad don Juan Carlos.»

El general Haig, quien recientemente declaró en Bruselas que el proceso de integración de España en la OTAN sigue su marcha, no quiso confirmarnos si efectivamente también se había tratado este asunto a lo largo de su conversación con el monarca español. «Estoy de vacaciones -nos dijo- y no puedo entrar en discusiones sobre este asunto; además, este tema, por su importancia, desbordaría una simple conversación periodística.»

Fuentes bien informadas de Madrid aseguran que la visita del comandante supremo aliado y jefe de las Fuerzas norteamericanas en Europa, Alexander Haig, al Rey don Juan Carlos, en Mallorca, ha tenido un carácter esencialmente protocolario.

Al contrario que en el acuerdo defensivo de 1970, el jefe supremo aliado no tiene asignada una misión específica en relación con el desarrollo del tratado, aunque su papel ahora puede ser mayor.

Según aquel acuerdo, el jefe supremo aliado era el consejero militar norteamericano del comité conjunto hispano-norteamericano. Este comité estaba formado por el ministro de Asuntos Exteriores español y el embajador norteamericano. El comité se asesoraba en problemas militares del comandante supremo aliado y del jefe del Alto Estado Mayor español.

En el tratado de 26 de enero de 1976, el comandante supremo aliado no aparece ni en el Consejo hispano-norteamericano, formado por los ministros de Asuntos Exteriores de ambos países, ni en el Comité Militar Conjunto, formado por los jefes de los altos estados mayores de los dos países; tampoco aparece en el Estado Mayor Combinado, formado por dos oficiales generales designados por los respectivos Gobiernos y que, sin duda, tienen menor rango que el comandante supremo aliado.

La función del comandante supremo aliado aparece como crucial en otro aspecto: como la persona que debe facilitar la relación defensiva de España «con los arreglos de seguridad existentes en el área noratlántica», y la misión del Estado Mayor Combinado «será la elaboración de planes que estén en armonía con los arreglos de seguridad existentes en el área del Atlántico Norte».

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