Piden pavimentación y transportes

«La pavimentación de las calles es urgente si queremos que penetre en el barrio algún medio de transporte. Sólo contamos con una camioneta, y la parada más cercana está a medio kilómetro. Nos sentimos aislados», han declarado a EL PAIS, los vecinos del Pozo del Huevo.

La Colonia de San Francisco, más conocida como Pozo del Huevo, es una barriada de chabolas situada en el kilómetro 2 de la carretera Vallecas-Villaverde. Estas chabolas dan albergue a 350 familias -325 son payas y 25 son gitanas- que totalizan una población de 2.000 habitantes aproximadamente, todos ellos emigrados de diversos pueblos a la capital madrileña.El poblado, que se halla en pleno descampado, muestra un aspecto de ruina y pobreza. Las chabolas, adosadas unas a otras, son muy pequeñas -tres habitaciones, como término medio, que hacen de cocina, comedor y dormitorio-, carecen de servicios higiénicos en gran número de ellas, y en su mayoría están ocupadas por más de seis personas, lo que da origen al hacinamiento y a los problemas -psicológicos, de higiene y educativos- que éste conlleva.

Tanto la construcción de las chabolas como los materiales empleados en la misma son de baja calidad, dada la penuria económica de sus habitantes. Esto determina que en tiempos de lluvias la humedad sea permanente en el interior de las viviendas, y por consiguiente, se produzca un elevado número de enfermedades pulmonares y reumáticas crónicas.

Ambulancias, camionetas y taxis se niegan a entrar en el barrio, al no existir ningún tipo de pavimentación, por lo que sus habitantes quedan aislados del mundo exterior y desasistidos, casi por completo, ante cualquier emergencia ya que dentro de la barriada no existe ningún servicio de asistencia sanitaria. Unido al problema de la pavimentación está el de un deficiente alcantarillado que da lugar a inundaciones cada vez que llueve.

Como resultado de las diversas gestiones llevadas a cabo por la Asociación de Cabezas de Familia del Pozo del Huevo, se ha conseguido, la aprobación de un Plan de Pavimentación para el barrio, pero las obras no se han iniciado todavía a falta de su publicación en el Boletín Oficial del Estado.

Hasta hace poco tiempo se carecía de luz y agua. Actualmente, la instalación del tendido eléctrico en el barrio es insuficiente y presenta serios peligros de incendio debido a que algunos postes de luz se encuentran situados en el interior de las chabolas y a la caótica superposición de los cables. En cuanto al agua, 30 familias carecen todavía de ella.

El único medio de transporte del barrio es la camioneta P-30, con recorrido Vicálvaro-Villaverde. La parada más próxima de esta camioneta se encuentra a medio kilómetro de la barriada, y es preciso esperarla entre veinte y cuarenta y cinco minutos.

Se han realizado gestiones para que alguna camioneta penetre en el poblado, pero esto no podrá llevarse a cabo mientras no se pavimenten las calles.

A estos problemas puede añadirse la carencia de buzones y la existencia de una sola cabina telefónica, que funciona en muy pocas ocasiones. Se ha solicitado a la Compañía Telefónica la instalación de una cabina interurbana, ya que cuando es necesario poner una conferencia los vecinos del Pozo del Huevo tienen que recorrer dos kilómetros y medio hasta el pueblo de Vallecas.

Las calles y los alrededores del barrio son un foco de infección e insalubridad por la cantidad de basura que se acumula en ellos. Para solucionar este problema sería necesaria una limpieza de los mismos y la instalación de containers donde depositar la basura que, generalmente, permanece fuera de las viviendas porque un gran número de mujeres está fuera del barrio -por motivos laborales- cuando llega el camión de recogida de basuras.

Los problemas expuestos son los más urgentes y los que la comunidad de vecinos siente como más necesarios a solucionar.