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"Lo que ocurre en el Líbano va contra todos los árabes"

Los representantes de la OLP en París, Bonn, Argel y otras capital han puesto de manifiesto estos últimos días la convicción de organización de que en el Líbano se está llevando a cabo un complot antipalestino. Estos temores han sido confirmados a EL PAIS por representantes de la citada organización en Madrid, señor Feysal Helui.Preguntado si cree que la actual intervención siria en el Líbano podría llevar a la destrucción manos de las fuerzas sirias del delirio militar de la Resistencia palestina, el señor Feysal responde categórico: «Estamos ahora en pleno septiembre negro (alusión a los ataques de que fueron objjetos los palestinos en Jordania en 197 Somos víctimas de un complot, Siria se ha convertido en su instrumento».

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En lo que a la Resistencia palestina respecta el complot internacional, según el señor Feysal, es «creación de un Estado federal entre Sirla y Jordania, (el Líbano habría Sido, según este complot, incluido parte dentro de Siria, parte como Estado del Sur) y una posición de Palestina (la orilla occidental del río Jordán, o Cisjordania)».

«Lo que ocurre en el Líbano, consideramos nosotros, no va solamente contra la Resistencia palestina, sino contra todos los pueblos árabes». El representante de OLP estima que la Resistencia palestina es el principal óbstaculo contra esa conspiración, y que eso precisamente se pretende, una vez más, aniquilar su existencia física y política, para «poner al mundo árabe en manos del imperialismo internacional».

Los objetivos principales del proyecto, nos explicó, serían hacer que la Resistencia palestina reconozca al Estado de Israel, controlando las economías de los países árabes, principalmente el petróleo, estratégicamente mantener la fluencia militar en el Mediterráneo, teniendo en cuenta que el mundo árabe posee sus costas desde Gibraltar hasta Alexandrta».

A lo largo de toda la guerra civil libanesa, comenta el señor Helui se nos ha acusado de entrar en conflicto religioso, después de haber propiciado la lucha de libaneses contra palestinos, y por último, de poner en peligro la independencia del Líbano. «Conviene precisar, indica, que la Resistencia palestina no interviene en los asuntos internos de los Estados árabes menos que éstos no intervengan los nuestros propios».

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Preguntado finalmente qué esperanzas puede depositar la OLP en los Gobiernos árabes, cuyos representantes reunidos urgentemente en el Cairo se oponen a intervención armada siria, el señor Feysal se muestra escéptico. «Consideramos que algunos regímenes árabes han intervenido directamente en función del complot junto a Siria. Otros también resultan culpables por su absoluta inacción. En realidad, concluyó, la revolución palestina es víctima de estas inmisciones árabes desde 1936».

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