La elección del presidente del Líbano puede volver a aplazarse

, No se sabe con seguridad si hoy tendrá lugar la sesión parlamentaria en Beirut, para elegir el nuevo Presidente que suceda a Suleiman Franjieh. En caso de que la elección, prevista inicialmente para el sábado pasado, sea de nuevo aplazada podrían incrementarse los combates entre las facciones.El jueves pasado el presidente de Siria, general Hafez Al Assad, se entrevistó en Damasco con Yasier Arafát, líder de la resistencia palestina, y con el jefe de la comunidad chiita del Líbano, Imán Mussa Sabre. Se cree que esta entrevista podría facilitar la celebración de la sesión del parlamento. El Gobierno sirio sigue apoyando la reunión. Rumores que circularon en el Líbano informan de que las fuerzas militares sirias comenzaron el jueves pasado la retirada, para cumplir determinadas condiciones impuestas por grupos de la izquierda.

Kamal Jumblatt, líder musulmán izquierdista, declaró en días pasados qué una condición previa a la sesión parlamentaria, es que ésta tuviese lugar sin ninguna clase de presión siria. El jueves, Jumblatt volvió a pedir que, dada la presencia de las unidades sirias, la reunión fuese de nuevo aplazada.

Tanto Siria como las facciones conservadoras, -cristianas y musulmanas- son partidarias de que la elección tenga lugar hoy. Pese a los rumores de días pasados no se presentó el «tercer candidato». Es decir, Sarkis y Edde competirán ante los 99 parlamentarios libaneses.

Elias Sarkis, conservador, está claramente apoyado por Siria y la Falange libanesa. Por su parte, Raymon Edde, goza de las preferencias de los izquierdistas musulmanes y de los palestinos. Su partido, el «Bloque Nacional», estuvo desde el primer momento alejado de la contienda. Pero por mantener soluciones de compromiso y por criticar la presencia siria, acabó recibiendo las simpatías de la izquierda.

El régimen sirio considera que la elección presidencial es condición inexcusable para poner de nuevo en marcha el plan sirio palestino del 25 de Abril, también aceptado por Jumblatt, que contaría con un alto el fuego una simple mediación de los soldados sirios y finalmente, una decidida actitud en el camino de las reformas político-sociales, que la nación necesita.

No obstante el último alto el fuego parece ser el más respetado y el comité sirio-palestino-libanés, posee una mayor efectividad. Si la situación es algo más tranquila en el centro de Beirut y en las proximidades del puerto es porque, además, unidades palestinas tomaron posiciones entre los beligerantes.

Si hoy no tiene lugar la sesión parlamentaria y con ello se recrudecen los combates, el poderoso Ejército Sirio podría intervenir serían difíciles de preveer. Se rompería la colaboración OLP-Siria y se atravesaría el límite de seguridad» trazado por Israel. Más allá de este límite, afirmaron gobernantes del Tel Aviv en días pasados, el Ejército de Israel se vería obligado a intervenir.