Detenido el jefe de la derecha liberal italiana

Edgardo Sogno, embajador de la República, jubilado y exponente de la derecha del Partido Liberal italiano, fue detenido anoche por la brigada especial de policía antiterrorismo de Turín por conspirar contra las instituciones del Estado italiano.Desde agosto de 1974, Sogno había caído en la red de la encuesta del juez instructor de Turín Luciano Violante como un protagonista de la «reversión liberal-burguesa de derechas que pretendía proponer soluciones traumáticas a la actual disgración de la República». La encuesta se dirigió en tres direcciones sobre Orden Nuevo y Orden Negro del príncipe Valerio Borguese. La audiencia territorial de Turín condenó ayer a nueve exponentes de Orden Negro.

A Sogno y a su colaborador Luigi Cavallo, también detenido, se les acusa de atentado contra el presidente de la República, que el Código Penal italiano castiga con cadena perpetua, de atentado contra la Constitución del Estado, punible con cárcel no inferior a doce años y de conspiración política mediante asociación punible con cinco a doce años de cárcel.

Sogno fue comandante partisano durante la resistencia, por lo que se le premió con la medalla de oro de la resistencia. Terminada la guerra fue miembro del directorio del Partido Liberal, y por sugerencia del ministro del Interior de entonces, el democristiano Scelba, organiza el movimiento Paz y Libertad, un cuerpo de voluntarios civiles en función anticomunista. Tras casi veinte años de ejercer la diplomacia en el exterior, Sogno retornó a Italia, y en torno a los setenta organizó la llamada mayoría silenciosa, la derecha silenciosa «decidida a actuar», que en seguida se reveló en el país más que como un grupo de burgueses bienpensantes como un puñado de nostálgicos que buscaban nuevas banderas bajo las que Militar. Se entrecruzaron en el grupo pistas de personajes de servicios secretos no mejor identificados, así como la actividad de otros compañeros partisanos un tiempo, combatientes en la guerra civil española con las Brigadas Internacionales contra Franco y que como el líder republicano y ex ministro de la Defensa, Rodolfo Pacciardi, fundador del movimiento Nueva República han tratado estos años sin éxito de crear una «defensa nacional» incluso un «poder militar» contra la llamada quinta columna comunista. La prensa italiana a su tiempo reveló las relaciones que tales grupos han mantenido siempre con diplomáticos españoles y ambientes fascistas de Barcelona y de Cádiz.

Sogno también estuvo vinculado en sus actividades subversivas a la organización Rosa del Venti, de la que forman parte notables personajes de la región norte de Italia.

A la Rosa del Venti estaban ligados el constructor Remo Orlandini, el general de Brigada Hugo Ricci, la condesa María Antonietta y otros jefes militares, todos ellos muy próximos al príncipe Borghese (conodico como el príncipe negro), omnipresente en todas las tentativas neofascistas de subvertir el poder italiano en los últimos años.

Edgardo Sogno y su colaborador fueron trasladados a Roma con un despliegue policial de escolta como pocas veces se ve. El ex diplomático estuvo siempre sereno y no se mostró sorprendido cuando los agentes del cuerpo antiterrorismo le detuvieron.

Sogno fue sometido a un primer interrogatorio, pero el más absoluto secreto de instrucción rodea por el momento este caso de renacimiento de las Tramas, Negras, que los italianos parecían haber olvidado a fuerza de los problemas económicos y políticos que los envuelven en estos momentos.