_
_
_
_

Juan Sebastián Verón: “Argentina no es la selección de Messi”

Titular en tres Mundiales, el actual presidente de Estudiantes de La Plata llama a confiar en el equipo, por encima de la figura de su máxima estrella. “La selección argentina es una trituradora”, advierte

Jan Sebastián Verón en el predio donde entrena Estudiantes de La Plata, tras la entrevista con EL PAÍS.
Jan Sebastián Verón en el predio donde entrena Estudiantes de La Plata, tras la entrevista con EL PAÍS.Mariano Martino
Más información
Roa: “Ojalá que en Rusia esta vez no pegue en el palo y salga”
Rodríguez: “Reemplazar a Maradona fue una misión imposible”
Goycochea: “Viajé a Italia 90 como futbolista y volví como héroe nacional”

A una hora de autopista desde Buenos Aires está el predio de City Bell, el lugar en el que entrenan los futbolistas de Estudiantes de La Plata, el club en el que jugó desde niño, debutó en primera y alcanzó la gloria Juan Sebastián Verón (La Plata, 1975). El mismo club que hoy preside y en el que se dio el gusto de disputar algunos partidos el año pasado, con 42 años, en una cruzada para acercar fondos que ayuden a terminar el nuevo estadio. Allí también vive junto a su familia, atravesando un gigante campo de golf. La Bruja -como le llaman- carga con la eliminación de Argentina en la primera ronda del Mundial de Corea-Japón 2002, un recuerdo que los argentinos prefieren olvidar y que condenó al exilio al entrenador de entonces, Marcelo Bielsa.

Pregunta. ¿Qué pasó en Corea-Japón?

Respuesta. No hay una explicación. Está claro que en un Mundial no tenés margen para el error y nos pasó lo que nos pasó. El grupo que nos tocó [N. de R.: el F, con Nigeria, Suecia e Inglaterra] no es excusa, porque tenés que estar preparado para jugar con los mejores.

“Mi deuda pendiente es ganar grande con el seleccionado”.

Lo que muchos argentinos todavía recuerdan es la aparente tranquilidad con la que Verón -por ese entonces futbolista del Manchester United- jugó los partidos ante Inglaterra y Suecia, que condenaron el destino de la albiceleste. Hasta el propio Maradona le sigue castigando por ello. “Mejor que Verón arme la lista de Inglaterra y no la de Argentina”, dijo Maradona el año pasado, en momentos en que la Bruja era secretario de Selecciones de la AFA. Sin embargo, Verón asegura que nadie le reprocha nada en la calle y echa culpas al periodismo “que se olvida que no es ponerse la camiseta de la selección y jugar como Maradona”. "Creo que fui demasiado criticado, precisamente por EL PAÍS. Pero con el tiempo aprendí que hay que separar los tantos y relacionarse mejor con los medios", dice Verón.

P. ¿Había química en aquel grupo de 2002?

R. Sí, y también en los otros dos que me tocó integrar. El grupo funcionaba y con respecto a eso no tengo ningún reproche. Obviamente que después te relacionás más o menos con alguno u otro jugador. En Parma y Lazio compartí con [Roberto] Sensini, [Diego] Simeone y [Abel] Balbo y también lo hacíamos en la selección. Nos llevábamos bárbaro.

P. ¿Cómo lo trató el hincha?

“El trabajo en conjunto debe suplir la aparición de otro Messi”.

R. Silbidos, alguna que otra puteada, pero a mí me deja tranquilo que todo lo que se genera se genera adentro del campo de juego. Yo ando por la calle normalmente y nunca tuve problemas.

P. ¿Se siente en deuda?

R. Me hubiera gustado al menos cumplir con la expectativa de meterme entre los cuatro mejores. Yo me quedé siempre en cuartos de final y en uno no pasamos la primera ronda. Mi deuda pendiente es haber ganado algo grande con el seleccionado. Después, está la realización de haber participado en el torneo máximo para cualquier profesional. Eso que soñás de chiquito y lo trabajás de grande.

"La selección es una trituradora, porque no hay paciencia".

P. ¿Cómo ve a la selección argentina para el Mundial de Rusia?

R. Convengamos que esta última etapa fue muy traumática, por el proceso en general, las finales perdidas, la gente que aprieta, el periodista que se olvida del periodismo y se convierte en hincha. No se tiene en cuenta el contexto y se termina por triturar al jugador que podría llegar a darte una solución. El ejemplo es [Gonzalo] Higuaín, que empezó insultado y hoy es fundamental en la delantera de la selección. De Higuaín pasamos a [Lucas] Pratto que jugó dos partidos, luego [Mauro] Icardi y en el medio le tocó a [Darío] Benedetto, a [Lucas] Alario y al chico Lautaro Martínez. Y terminamos nuevamente en Higuaín. La selección es una trituradora, porque no hay paciencia.

P. ¿Pueden jugar en contra las tres finales perdidas?

R. Ojalá que no y ojalá que tengan la suerte de llegar a otra final. El fútbol hoy no es solo el talento que tenga un jugador, influyen mucho otros componentes. Si hasta [Ángel] Di María hizo referencia a los memes con los que los cargan. Tenés que estar preparado para las redes sociales. Por eso es bueno tener coach, psicólogo y gente que te ayude a superar estas cosas. Los chicos hoy son muy permeables y tienen tanta influencia de todos lados que llega un momento en que se hace difícil de procesar.

P. ¿Qué pasará luego de Rusia?

R. Hay que mejorar y seguir evolucionando. Y para eso hay que trabajar. El futbol argentino no va a dejar de sacar jugadores, pero hay que evolucionar en la dependencia de alguien que se ilumine y nos lleve a ganar algo. El trabajo en conjunto debe suplir la aparición de un nuevo Messi.

P. ¿Influye Lionel Messi en el armado del equipo?

R. No. A mí me dicen lo mismo acá en La Plata. Creen que traigo a alguien porque es amigo mío. La amistad es una cosa y el trabajo es otra. En esto no creo que un jugador se pueda permitir, y más en una selección, poner a este y sacar al otro. Porque cuando ponés a ese, sacás a otro que comparte espacio y tiempo con vos. Ahora, lo que hay -y yo lo he hecho- son opiniones sobre algún partido o como se podría plantear la estrategia. Después la decisión es del técnico. No creo que esta sea la selección de Messi.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_